Créeme si te digo,
que eres el ave y la planta,
la flor y el pájaro,
que eres la flora,
que eres la fauna.
Créeme si te digo,
que eres lo cerca y lo lejos,
el kilómetro y el milímetro,
que eres lo corto,
que eres lo extenso.
Créeme si te digo,
que eres lo nunca y el siempre,
el posible y lo eterno,
que eres creíble,
que eres lo cierto.
Créeme si te digo
que eres el presente y futuro
el hoy y el mañana
que eres el tiempo
que eres el verbo.
No me creas si te digo
que eres recuerdo y olvido
el dolor y el sufrimiento
que no serás más nada
que no serás más nadie.
No me creas, Amor,
no me creas si te lo digo,
siendo tú, un mundo de este mundo
semejante mundo
al que vivimos.