La herencia de Madame Canaris -Capítulo 6- (Novela)

– ¿Da su permiso, Jefe?

– Pasa, Raymond, pasa. Puedes sentarte sin tanta ceremonia inútil.

El sargento Raymond Pollain Quentin se sentó frente a su Jefe Alain Marlon Brandy Delon.

– ¿Me necesitaba para algo, Jefe?

– ¡Escucha bien, Pollain! ¡Hoy no es mi día ni tampoco es el tuyo! ¿Entendido?

– Bueno es saberlo, Jefe.

– ¡Pues entonces deja de llamarme tantas veces Jefe y hablemos como dos amigos!

– Es que yo sólo soy sargento y usted el el Jefe Inspector Superior.

– ¿Estás buscando que te meta un paquete? Porque si quieres que te meta un puro te meto un puro. Sigue Leyendo...