Tu miedo a soñar en soledad,
te acerca a mis costillas.
Odias las horas gastadas.
Olvidas tu sombra en la terraza,
y el reloj tamborilea en mi muñeca.
No se detiene. Nunca se detiene.
Se desahucia la tarde. Huele a nicotina.
Bebemos vino.
(Momento bukowskiano. Reímos)
Cesa la noche. Ya es domingo.
¿Leerá Dios la biblia?
Me preguntas.
.Sales por esa puerta.
La mañana huronea a través de una rendija.
Escribo. Leo.
¿Acaso, me reinvento?
Descubro marcas de tus dientes,
en mis pechos.
Gasto el día. Café y cigarrillos.
Ya no escribo.
Y espero.
Anitamae(3301)
Horas que pasan lentas sucediéndose el día.
Me gustó la serenidad que desprende.
Un abrazo
claro que te reinventas,no dejes de hecerlo, muy bonito, un abrazo
Muchísimas gracias por tu comentario!
Un abrazo
Alexis, me alegra que te haya gustado!
Gracias por leerme.
Un abrazo