Hoy voy a inventarme el mapa de tu cuerpo
de tus prados, tus mesetas, de tus ríos,
de los valles que se pierden entre el verde,
con la hierba y matorrales desde siempre…
Hoy voy a inventarme ese cuadro que es tu cuerpo,
ese intenso fuego de amapolas en tus labios,
con el rojo cuyos pétalos se mecen con el viento,
y la arena que acaricia cada orilla, tus mejillas…
Hoy voy a parar e inventarme ese lienzo del salón,
ese que espera desde hace tanto, ese que falta,
con tantas y tantas ganas… que cuando llegues
y como siempre busques mis labios… No los tendrás…
Hola Namari. No hago comentarios. Sólo guardo silencio para recordarte. El ayer se quedó volando… el hoy está quieto… el mañana será completamente diferente. Un recuerdo, amiga. Nada más. Lo demás lo dejo en el silencio porque prefiero vivirlo en el silencio. Yo estoy aquí, como siempre, con mi joven Sueño de siempre, como el Niño del Puente pero es mejor decir “silencio”… que hable el “silencio”…
Hola Namari, este poema me encantó, como muchos que has escrito, eres una gran poetisa, como siempre es un gusto leerte. Saludos