En 1973, cuando el General Franco se encontraba agonizando, se oía continuamente en las emisoras radiofónicas de España, una canción titulada “Un millón de sueños” que cantaba Cecilia. En realidad el título verdadero de la canción era “Un millón de muertos” y era una denuncia contra los casi 40 años de Dictadura fascista de Franco. Pero la censura actuaba fuertemente todavía y transformaron el título de la canción.

Hace varios años el escritor Mario Benedetti escribió el siguiente poema:

Algunos cantan victoria
porque el pueblo paga con vidas
pero esas muertes queridas
van escribiendo la historia.

El millón de muertos de la Guerra Civil Española no sirvió para alcanzar la libertad, pues la libertad no es la Victoria que tanto predicaban los falangistas y los fascistas del Régimen de Franco. No existe libertad cuando se la impone a través del terror, la persecución y la muerte. La verdadera libertad es un canto a la vida, se alcanza cuando creamos un mundo libre y más justo y, en caso contrario, es nuestro deber rebelarnos para poder crearla.

Cualquier revolución que se precie de haber matado miles o millones de seres humanos es una revolución perdida entre la maldad y la injusticia. Los casi 40 años de gobierno del Generalísimo Franco fueron presentados al mundo como años de libertad pero en realidad siempre estuvierom basados en la persecución de las ideas de libertad, en el encarcelamiento de los que hablaban de la libertad.

No es una verdadera libertad humana destruir a los seres humanos por sus pensamientos e ideas. Ninguna ideología dominante puede hacer eso porque eso se llama Dictadura en todas partes del mundo. Las ideologías deben basarse no en la muerte sino en la vida. Cuando la Victoria se basa en el despotismo no es Libertad.