Y un muelle de su colchón
le atravesó el corazón,
y allí se quedó…
En aquella cama
que todo vivió;
caballero o dama,
que nunca olvidó.
Y un muelle de su colchón
le atravesó el corazón,
y allí permaneció…
Ni dolor ni rencor mostraba,
ella era la Reina de la Fantasía…
Pero nadie lo sabía…
A nadie le importaba.
Y un muelle de su colchón
le atravesó el corazón,
y allí su último frío encontró…
“Amor a cambio de mentiras eran su pan de cada día…y así a todos demostró que aún muerta,seguiría estando viva…”
Bonita Fantasía, rojofuego. Seguir siempre vivo como la madreselva de todas nuestras experiencias es muy importante. Me gustó el verso.