Hoy no seré el motivo de tus suspiros
que van corriendo detrás del aire
ni seré ese brillo que daba a tus ojos
como el barniz a la madera hace.
No seré ocupación de tus pensares
que se peleaban al no pensarme,
tampoco el reloj de tus ansias
parando el tiempo en abrazarme.
Y no volveré a ser el escondite
de tus miedos o inquietudes
como tampoco lo serán
de tus mentiras o verdades.
No seré ya tu vela encendida
cuya llama podía alumbrarte
y que dentro de ti mantenía
el calor que deseaste.
Mi voz ya no será tu música
que clamaban tus oídos
ni escucharán aquellas palabras
que como melodías querías sentirlas.
No seré tu imagen del día
para después por la noche soñarme
hasta que en un nuevo amancer
tus ojos volvieran a verme.
Muchos eran los motivos
que pude ocasionarte
y que hoy se resumen en uno,
la causante de tu olvido,
tu motivo de olvidarme.
María.M.T