. No sé qué cojones escribir. Me gustaría decir por ejemplo que tengo ganas de follar aunque acabe de hacerlo. El hecho de que esté bombeando hacia mí para meterme eso hasta dentro me hace separar las piernas jodidamente y dejar escapar sonidos que ni yo misma reconozco o entiendo. No me entiendo cuando siento que me penetra. Y no paro de querer sentirlo ahí una y otra vez como si fuera a derretirme de un momento a otro y lo mío se estuviera medio fundiendo con el azúcar, todo mezclado, en una sensación de silencio penetrable. Qué vulgaridad, señores. Qué magnífica y jodidamente deliciosa vulgaridad.