La inmortalidad, navega por un torrente de inspiración.
Pienso… luego insisto. Sueño… luego soy.
Soy…
quien se desprendió del crepúsculo,
aquella nada negra, que antes fue nube y resplandor,
ebrio de lunas nuevas. Nómada.
Eterno peregrino, con la muerte por destino.
Me reconoceréis…
llevo la cicatriz del tiempo en la mirada,
mirada que contempló las vastas extensiones de aquel Dios;
Tan eterno como yo.
Mi voz…
dolida, extraña, serena y distante,
cubierta de ausencias y ensueños,
invoca el poder de la palabra y sus códigos perpetuos.
Mis ojos…
audaces a la criptografía cíclica del espacio,
visitaron la quietud de la noche y la enérgica magia del reposo.
Mi memoria…
Ilumina; imágenes, sombras, espectros, hazañas, herencias.
Vislumbra; profecías, enigmas, combinaciones, claves.
Será, la perseverancia involuntaria del recuerdo,
ante la supersticiosa sensación del olvido.
Vida y muerte…
las imagino, sin asombro ni resignación.
Una, territorio amargo y confidente, cautiva entre secretos.
La otra, La dicha o el vacío, entre geranios mudos,
envueltos en misterio y lejanía.
Manifiesto, promulgo…
mi admiración, hacia los diminutos perfiles de la grandeza humana,
fervorosos amigos de la luz. Custodios esplendidos de la dicha.
Aprendices de la creación. Educadores del amor y el odio.
He aquí, quien igual que yo,
no le teme a la muerte, no le teme a la vida,
las confronta, con hidalga valentía, las distrae y se sustrae.
Ella. La palabra. Tan eterna como yo.
Lenguas vivas y muertas…
bilingüe ecuación de la meditación,
divulgan, dicen, pero no expresan
yacen estáticas, impávidas y lentas.
El hombre…
que antes era arcilla y tiempo.
cobró vida y eternidad.
La palabra se hizo carne. La carne se volvió palabra.
Eterna. Nombradora y caminante a pasos firmes,
en busca de vísperas encendidas y llegadas adormecidas.
Ella. La palabra. Tan eterna como yo.
Tocas el tema de la eternidad de la Palabra con un reflejo filosófico amplio y diletante. Tu poema se basa en principios mutuos de interacción entre el yo de tu misma palabra y la Palabra inmortal del universo. Tocas elementos de trascendencia metafórica e intuitiva y eso es bueno. Yo también elegiría este poema para la Selección que estás haciendo. El ritmo es discontinuo pero efectivo. A los versos raudos los mezclas con versos reflexivos y vas combinando el paso del “tempo” de lo medio-corto a lo medio-largo haciendo expresividad con lo que está ocurriendo en la mente del poeta. Bueno. Siempre se puede mejorar en poesía… pero llevas un camino muy interesante. Quizás debas significar un poco más de concreción en tus fórmulas filosóficas. Sin embargo el conjunto me ha gustado lo suficiente como para señalarte que lo puedes seleccionar entre tus favoritos según mi criterio personal que, como tal, es totalmente subjetivo y que puede o no puede coincidir con tu forma de verlo. Un abrazo, compañero.
Magnífico.
Estructura, imágenes, tema, es perfecto.
Manifiesto vital que ahonda en los caminos de la vida, que baja hasta los infiernos y vuelve con la palabra, eterna como un dios que es hombre, o un hombre que es dios.
Amen 😉
Me ha encantado. Alaia
Hola Alaia.. (Muy bonito el Nick).. me gusta. Te doy las “Gracias” por el comentario, sobre mi texto, me motiva. Creo que es la primera vez que opinas sobre uno de mis trabajos. He leido algunos de los tuyos, quiero decirte que entre mis favoritos por el momento están “Lo he visto”, “Dulces sueños”, Cae la noche” y “Tu” exponen una amalgama perfecta entre sencillez y profundidad. Espero que sigamos intercambiando pareceres. Felicidades por tu arte.
Only, Gracias por tus comentarios, siempre salgo fortalecido despues de tus apariciones, estuve leyendo algo de tu obra y quisiera significar lo contradictorio y metaforico de “Estigia” (Me gusta la selección del nombre); “Hay exilio entre los dos” muy particular y diferente; “Ya fuiste” un juego de palabras y conjugación muy inteligente; “Tango surrealista” intenso y sugerente. Felicidades por tu trabajo.. un abrazo.
Gracias por tomarte tu tiempo en leer alguno de mis poemas.
Por mi parte, un placer leerte. Es una suerte que hayas arribado a estas costas vorémicas.
Un saludo