Nos reciben las tardes empezadas
que se suceden súbitamente acometidas
en el muro del color de las promesas
lo mismo que una espuma en la pregunta:
¿Quiénes son los rostros de estos vivientes
que nos dicen los años que sostenemos?.
Hay quien habla, también, de lo sagrado
en estos días que ocurren en el tiempo.
Cada cuerpo es un fondo sulfuroso
de palpitantes momentos bajo el cielo;
las tardes inauguran los hablares
del espíritu impreso en cada escena
y la imagen de estos nuestros breves días
nos recuerdan maneras de comprender
la sombra de los ojos diletantes
que estremecen de sueño las edades.
Nueva disposición en estas tardes sazonadas
en lo curioso del símbolo intencionado;
la experiencia nos dice que somos cuerpos
expresándonos con deseo de propia historia
y suenan las campanas del propósito
en la cumbre del clima ya sin sol.
El invierno del ahora ha llegado
como mundo de recuerdos muy cercanos.
Levantémonos tranquilos del ensueño
con el corazón enseñándonos caminos,
que del regreso hay intimidad latente
en el fondo del tiempo y la vida entera.
Poco queda ya de entre las flores
porque no somos los mismos del entonces
y juntamente con la esperanza exaltada
nos quedan transiciones de común empeño.
Me digo que la libertad es todo aquello
que somos cuando dedicamos a la memoria
nuestros nombres finalmente imaginados
en el cielo roto de estas grises tardes
del trazado estremecido por las sombras.
Y en esta historia de la vida nos quedamos
aprendidos en la orientación de este momento.
Y así se pasará ese invierno, de tarde en tarde… interesante reflexión hecha poesía… Saludos!
Una reflexión melancólica, tierna y con cierta esperanza en el aire.
Esta época del año nos trae emociones y recuerdos agridulces, que refleja muy bien tu poema.
Navidades pasadas, unas muy alegres, otras menos, tristes incluso… Las estaciones, de cuyo cambio no quisiera prescindir, nos aportan estados de ánimo cambiantes.
Epoca de reflexión y de nuevos planteamientos, un poco agobiados por la escasa luz del sol que, afortunadamente, comenzará a crecer en unos días.
Un saludo.
Tus 5 estrofas de 8 versos cada una (una medida muy racional para un poema tan profundo) expone una intensidad muy acusada en el tema. Al final hablas de la libertad como todo aquello que la memoria nos recoge como vida del entramado existencial. Me parece un poema muy bien logrado donde vas elevando una cantidad enorme de sentimientos. Muy profundo y muy interesante, Diesel. La poesía al servicio de la filosofía de los seres. En el invierno del ahora me parece un excelente momento para visualizar la concatenación de ideas que nos propones a los lectores. Sencillamente excelente la profunidad del tema y su realización. Que tengas unas Felices Fiestas.