Estas vacaciones han sido absolutamente reveladoras para una mente como la mía:
Vereis queridos amigos de Vorem; Soy minusválido y porto una silla de ruedas, la cual, cada vez que voy de vacaciones a Murcia a casa de mis padres, dejo en la escalera del portal junto a bicicletas, sillas de niños pequeños etc, cojo mis muletas y para no manchar de tierra y agua el resto del edificio y la casa de mis padres, subo con ellos hasta casa, dejando la silla abajo. Pues bien, mis ojos se han abierto fieramente para darme cuenta de que hay seres humanos capaces incluso de robar UNA SILLA DE RUEDAS !!! Y así es amigos, me han privado de media vida para hacer la gracia, venderla por piezas o vete a saber en que piensa una mente retorcida a la hora de robar algo así. No me cabe en la cabeza que esa o esas personas no hayan sido conscientes de que se estaban llevando con esa silla de ruedas una vida entera.
Ahí os dejo mi reflexión, descargando con ella un poquito de mi indignación con este mundo incierto al que no se que le está ocurriendo.

Un abrazo a todos.