PECADOS CAPITALES….IRA

Y se sentó a esperar que pasara. Pero no sucedió. La calma no llego, y por cada minuto que el reloj restaba al día, el nudo en la garganta se cerraba más, haciendo imposible ya respirar, imposible pensar.
Sentado en la escalinata de una casa desconocida, sus manos sudadas encendían un cigarrillo tras otro, como si el humo nicotinoso doblegara de algún modo misterioso las ganas de salir corriendo, de quebrar los vidrios de los autos estacionados y gritar, gritar hasta que el dolor acabara.
-Que termine, que termine- repetía en su cabeza, tratando de borrar la imagen recurrente en su mente.
Intentó levantarse, pero sus piernas estaban unidas al suelo, como si una fuerza invisible conspirara para su sufrimiento.

Un perro se acercó, distraído. Le olfateo.
(-Animal torpe, con esos ojillos minúsculos, ridículos- pensó)
El perro agitó la cola en señal amistosa.
(-mmm… ¿Será que lo siente? ¿Acaso le doy lastima?…lastima de perro callejero…patético… )
Shuuu!!! Fuera!!!

Por un instante la distracción del perro aminoró la tensión. Fue el tiempo justo para reparar que en la esquina se acercaba ella sonriendo y, que como otras tantas veces, lo había hecho esperar más de la cuenta.

3 comentarios sobre “PECADOS CAPITALES….IRA”

  1. nadie mas que uno mismo, merece trato semejante si tu lo consideras así, mucha culpa extrapolar te inunda, si esperas al ser amado, solo puedes agradecer el caariñoso cariño del can y sentir su pasión por el futuro, muak

  2. Es ficcion y responde a un “trabajo” sobre los pecados capitales en la cotidaneidad…en este especificamente, la ira (en forma de enojo y frustracion). Concuerdo con que los animales son especialmente sensibles (por eso lo escogi para el texto), pero la intencionalidad es evidenciar la naturaleza irracional de la ira…que puede ser catalizada por cualquier cosa, y como cualquier agente externo puede ser tomado como antagonista bajo estas circunstancias.

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