Me llamas y el susurro de tu voz, me vuelve loca,
desabrocho suavemente cada botón de mi blusa,
me despojo de esa falda ajustada a la cintura,
de las chanclas que resguardan las plantas de estos pies
que por impulso, casi sin quererlo… me trajeron hasta ti…
Con ganas, con muchas ganas me abandono…
y con fuerza, con mucha fuerza me envuelves…
Cada poro de mi cuerpo te siente,
cada gota de tus aguas besa mi piel,
como siempre que me encuentras y me dejo ver…
y al mismo tiempo, cada vez es distinto…
Con ganas, con muchas ganas me abandono…
y con fuerza, con mucha fuerza me envuelves…
Cierro mis ojos, oigo tu latir,
me suena a música,
me sumerjo en tus entrañas,
bebo de mis labios tu sal,
y me lleno de vida…
!Bonito, Namari!. Un escenario poético para un amor idílico. Has hecho un poema verdadero y excelente, con momentos llenos de gran pasión. Muy bueno Linda Flor del Sur.