La muerte de Daniel Jarque ha sido todo un bofetón en pleno rostro para los pluriformes seguidores del Español de Barcelona repartidos por toda España y algunos lugares del extranjero. Un bofetón que ha resonado en todo el universo del deporte mundial… mientras las Ligas de Inglaterra, Francia y Alemania, han comenzado ya a “caminar”.

De momento, la tristeza anida en el corazón de todos los buenos españolistas (liderados por el gran De la Peña) mientras en el Zaragoza echan de menos, también, la memoria de aquel jugador llamado Murillo, que sin ser ninguna maravilla extraordinaria (pues era tan común como los demás) se había convertido en el máximo goleador del club maño… aunque muchas veces los árbitros hicieran “la vista gorda” o disimularan ciertas “cosas” que no conviene ya recordar.

El Real Club Deportivo Español tuvo sus momentos de gloria. Fue uno de los equipos que inauguraron la primera División de la Liga Española (en 1929) donde ha jugado durante 70 temporadas (4 temporadas, sin embargo, conoció lo que es jugar en Segunda División). Le cabe el honor a los españolistas de haber marcado el primer gol de la Historia de la Primera División Española y entre sus múltiples trofeos se encuentran: Copa del Rey Alfonso XIII de 1929, Copa del Generalísimo Franco de 1940, Copa del Rey Juan Carlos I del año 2000, Copa del Rey Juan Carlos I del 2006; además de haber llegado a se subcampeón de la Copa UEFA en 1988. Otros trofeos conquistados por el noble equipo del Español (que obtuvo el título nominativo de Real Club Deportivo en 1912, concedido por Alfonso XIII) han sido la Copa Macaia (1903), 13 veces la Copa de Cataluña y 2 veces la Copa Duvard.

Tuvo otros grandes momentos cuando jugaba en dicho equipo el extremo izquierda Czibor (cuando Piris era portero titular), quien hacía verdaderas diabluras por su banda izquierda. Pero el mundo es “ansí” (como diría un sencillo castizo español); un subir de “trepadores” (y todos los españloles sabemos lo que es un “trepa”) mientras los honrados deportistas sudan “la gota fría” para conseguir alcanzar sus sueños y sus ideales. El sueño es el sueño, amigo Daniel, y no hay duda de ello. Lo saben hasta en Don Benito (pueblo de la provincia de Badajoz). Todo esto es sólo fútbol compañero y colega Daniel Jarque…

Ahora tú, Daniel, sueñas ya en la Eternidad esperando a que tu querido Real Club Deportivo Español consiga mantenerse en Primera División una vez más. Tu querido Español luchará contra los demonios del fútbol para sonseguir victorias, empates y derrotas con que llenar tu Paraíso.

Y nos dejaron solos, querido Jarque… nos dejaron solos cuando ya teníamos en nuestras manos la famosa y querida Copa Fiocchi. Por eso yo, en homenaje a ti, te la entrego como capitán que fui del Estrella Olímpica. !No importan las trampas querido amigo Daniel!. !La Copa Fiocchi ya es tuya!. !Te la regalo de todo corazón!. Es el mejor regalo que te puedo hacer (ya sabes que soy económicamente débil pero muy fuerte en la resistencia humana; sobre todo ante el dolor de las injusticias arbitrales mientras algunos locutores (pocos por cierto) falsean los datos de los partidos). Te envío también un fuerte rayo de luz para que brilles sobre los campos de juego de la Eternidad, donde los jueces, árbitros y locutores de radio son, en verdad, honestos.

Adiós Jarque. Ya estás con Czibor al igual que con aquel Abel al que traicionó y mató por la espalda su propio hermano Caín. Ya te conocen en toda Europa y parte del resto del mundo Jarque y recuerda siempre que “hay más días que longanizas” (como dice el famoso refrán español).

No te preocupes amigo Daniel… el tiempo es la Eternidad y tú tendrás toda una Eternidad entera para seguir jugando en los campos paradisíacos del cielo, en las verdes praderas del “más allá” sin violencias de ningún tipo y sin engaños arteros de ninguna clase.

Sólo eso amigo. Sólo eso. Los ángeles cantan las leyes no escritas. Sí. Las leyes de Dios que, como sabes, no es deudor de nadie y basa sus decisiones en el Amor y la Justicia.

“En el REal Madrid, por ejemplo, hay una ley no escrita que dice que Raúl debe empezar todas las temporadas como titular, a quien se atreva a contestar a esta máxima se le atiza en la cabeza con el currículum del susodicho, que es como si te arrearan con la guía telefónica del estado de Michigan” (párrafo de un colega periodista de MARCA).

Al infierno el odio, amigo Jarque, al infierno el odio. Que de Distéfano aprendí a jugar siempre como si estuviésemos empatando a 0 (aunque estuviésemos ganando por 8-0) y de Kubala aprendí que para ser gran jugador de fútbol “hay que saber, hay que querer y hay que poder”. Y hablando de estos dos genios nacionalizados españoles es cierto que se dice y se comenta (quizás sean sólo unas leyendas mitológicas) que Distéfano brincaba por encima de las pelotas dejando a los defensas tumbados en el suelo y que Kubala cantaba con el balón en los pies. !Vaya usted a saber si fue verdad o ficción).

!Adiós con el corazón, Daniel Jarque, que con el alma no puedo!. Y te lo dice un “fan” de toda la vida del Athletic Club de Bilbao.

Adiós, amigo…