Cuando eres manantial para verme navegar mientras me elevo? cuántas veces puedes serlo para escribir mi bitácora de vuelo?
Cabello vertido sobre mi lecho, empieza un arco y volcanes son los pechos, un gemido, cambian de dirección, apuntan al elevarse de mis dos dedos que recogen agua entre sus yemas, ahora son nevados, descienden abruptas, verticales, gotas de agua que se pierden en el abismo donde mi alma cayó un día perdido.
Debería existir el sentido del pensamiento como el que abarca las sensaciones de los demás. Su subjetivo órgano es la mente y la mía te siente en todas sus formas, te mira imaginándote, te percibe soñándote, te besa pensándote, te toca traspasándote y te oye acallándose para poseerte en cualquier momento; justo en el que no estás.
Dulces sentimientos los tuyos.
me gsutó leerte Juanjo.
Un saludo
Un texto interesante, muy íntimo y muy subjetivo por lo que tiene de originalidad en tu epxeriencia propia. Saludos, compañero.