Todas las entradas de: Namari

Ya no habrá más despedidas.

Soñarte se hace eterno,
discurren los segundos,
sin parar ni un momento
y en el compás del minutero,
se adueñan las horas de mi pensamiento…

Pensarte se hace eterno,
dejándome no embargar,
por tu voz, tus risas, tus caricias,
que me traen los recuerdos,
aún cuando no estás…

Yo… no puedo…

No puedo decirte adiós,
aunque lo quieras con desespero,
en un momento cerrar lo nuestro,
aunque lo quieras, y lo desees,
yo… no puedo…
No puedo decirte adiós,
así sin más, romper los lazos,
de esta atadura que nos unió,
que me hace daño,
que me da vida, que me la quita,
mientras me miras…

Lucero hermoso (Nana breve)

Duérmete lucero hermoso duérmete,
con las estrellas que te acunarán
y que a tu oido susurrarán
palabras dulces que esos ojitos harán cerrar…

Duérmete lucero hermoso duérmete,
como la luna que arriba está
y así tranquila vigilará
que tú dormido te has de quedar…

Bajo tus pies…

Me acerco a tu pensamiento,
encontrar la manera de entenderte,
es un arte, una estrategia,
irresistible tentativa,
que no siempre es conseguida…

Intento mediar las palabras ,
un impulso no es conveniente.
Mejor callar y pensar,
para luego no lamentar,
el daño que puedo causar.

Quiero…

Quiero confundir mi sonrisa,
sentir tu risa.
Quiero mirarme en tus pupilas,
sentir tus ojos.
Quiero tocar las caricias de tus manos,
vivirlas mías.
Quiero fundir mis manos en las tuyas,
hacerlas una.
Quiero besar la epidermis de tu piel,
adentrarme hasta tu dermis.

“Querido” maltratador

Un día más llego a casa, cansada de una dura jornada laboral, y al abrir la cerradura mi cuerpo empieza a temblar… ¿qué será hoy? ¿algo no terminé? ¿algo dejé sin hacer?…
Quisiera poder dejar mi alma fuera, en el zaguán de casa, ya es bastante entrar mi cuerpo, curarlo me lleva tiempo, sana sí claro que sana, pero… ¿y mi alma? Para mi alma no hay tirita que la abarque…
Alma mía, sepárate de mí, quédate ahí… espera mi posible vuelta…
Pero mi alma, tal como tú… no escucha, no atiende a mi cabeza, ni puede acceder a los deseos de mi corazón, está conmigo… le falta valor… Sigue Leyendo...

Buscarte…

Buscarte es caer al suelo cansada,
mirar hacia la ventana y no verte,
es delirar en vida por tenerte,
es sentir y pensarme abandonada.

Es creerme en las noches mas amada,
aún palpando espinas por quererte,
puñales de dolor por entenderte,
sentirme nuevamente acorralada.

Dolor, Tú… Mi…

A veces, cuando ya no me acuerdo de ti
apareces, lanzas tu mano hacia mí
y me despedazas…
así para que te sienta, para que no te olvide,
tiras de mi espalda, de mi cuerpo entero,
de mis emociones, de mis ganas de vivir…

A veces, te gusta que te sienta,
que te repudie, que maldiga la estampa
que te trajo hasta a mí…
y me siento nada… aunque tenga todo…

Entre dos encrucijadas…

Las gotas de lluvia
pasean por el cristal
del otro lado las sigo,
con la yema de mi dedo,
mi mente se pierde, se va,
mientras sigo este camino…
Mis sueños volando van
sin encontrar un final,
y sigo la dulce ruta
de las gotas de la lluvia,
y sigo como si mi destino
en ellas quisiera encontrar.

Como todas las noches…

Tu mirada se pierde
entre los aires desiertos,
de las noches que vienes
a rescatarme los sueños,
me observas dormida,
me miras, me vigilas…
y en la plácida oscuridad
desconoces esos brazos,
y desandas tus pasos
ante el lienzo inacabado,
de mi cuerpo dormido
esperando tu beso.

MIENTRAS QUIERAS…

Era una alegría, dejarme tumbar en el sofá
una maravilla, sentir el aire y su frescor
respirar muy hondo, para acercar así
todo el aroma, que tú dejabas para mí…

y mientras tanto, aquí estoy
y mientras dure, aquí me tienes
y mientras quieras esa soy…

Siente como vienen,todos los recuerdos hacia tí
como se disparan, y de que forma tan sútil
era necesario, que hoy estuvieses aún aquí
para recordarlos, traerlos desde allí…

LA ESPERA

Y no encuentras hueco, para poder miraros…
y no hallas sitio, donde poder estar bien…
y te asaltan las ganas, y te asalta la furia…
y te asalta el dolor, el fuego, el ansia, la pasión…
y quieres decir tanto, y al mismo tiempo tan poco…
aprovechar los segundos, el tiempo que siempre falta…
dejar pasar todo, sin detenerte un segundo,
y cuando te detienes los segundos son horas…
y las horas se alargan, conviertiéndose en días…
y las noches en amaneceres, que no siempre son lindos..
y los días en noches, que se alargan sin fin… Sigue Leyendo...