Sentado y decepcionado por que el
amor de mí vida se fue con el
hombre al que más odio en este
mundo, vengo contigo a suplicarte
me perdones, yo no quise
hacerte daño, solo quería encontrar
lo mejor de mí vida en sus
brazos, pero como lo lees en esta
carta sabrás que e fracasado.
Te conocí sin saber que en ti conocería un
amor dulce y sincero, te hable
con la ilusión del corazón no con las
palabras de un cabrón, trate de besarte
pero di un paso atrás cuando supe
que luchar era primero, no conocerte
y hacerlo luego, luego.
Te exprese mí sentimiento, dulce
caricia de viento, te seguí lento muy
lento, me obligaste a hacerlo,
decirte lo siento yo soy primero.
Ya no queda nada; ni nada importa nada,
ya el camino es nada y mí alma queda en
nada, ya solo espero
tu llegada, mentira de noche,
otra de día.
Ya solo espero mí muerte: camino
de cruces volteadas. Solo quiero
tu llegada, mentira de noche otra de día.
Ya no queda nada, nada importa, nada duele,
nada siente. Ya solo espera mí alma tu llegada,
mentira de noche otra de día.
Solo queda nada en un vació solo y frió,
y solo muere por amor y no por vos en la nada.
Portal Literario Independiente
Uso de cookies
Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies