Beso cambalache
A las cuatro de la mañana, en verano,
el sueño de amor todavía dura.
A. Rimbaud
Quiero de tu cuerpo
sorber la vaguada
hasta que pare
el ardor de mi seso,
no retengas
humedades absorbibles
hasta que sane
mi mente agostada,
de tu boca a la mía
no más distancia
que el aire que sale
del beso cambalache.