Campanadas a medianoche …..
Y llegó la noche de fin de año , un año lleno de descubrimientos , algunos de los cuales tardaría bastante en llegar a entender ,unos pederían su encanto con el paso del tiempo , otros le vendrían muy bien para el futuro .
Había que preparar la cena de Nochevieja , entre todos los mayores reunieron algo de dinerillo extra para poder comprar , una liebre ( más dura que un rail ) …todo el día cociéndola con sifón para enternecerla y ni por esas ………… la acompañarían con una buena cazuela de tomates fritos pa mojar pan , papas fritas para acompañar , polvorones , higos , nueces , uvas para las campanadas y una botellita de anís La Castellana el mejor de aquellos tiempos por antonomasia .
Cenaron lo mejor que pudieron , rieron , cantaron y….copita va , copita viene ………, las mujeres no bebían mucho por la falta de costumbre , bueno todas menos una tía suya que pilló un colocón “ que pa qué “, empezó a gangosear ………., me levanto ,no me levanto, me levanto y …..catapum al suelo y encima se reía y todo , entre todos casi no la podían levantar se les escurría de los brazos no había forma de ponerla de pié la tía se les escurría y se reía ……….ay ay ay ……….. ja ja ja … eso era todo lo que salía por su boca , después de varios intentos la pudieron incorporar , decidieron llevarla arriba a las habitaciones para dejarla en la cama a dormir la mona ……..justo en el tercer escalón se queda traspuesta riendo a carcajada limpia y meándose encima , en ese preciso instante las campanadas iniciaban sus doce acordes …enmudecieron todos al unísono , el silencio se rompía a cada segundo dong….dong ….dong…. y el eco respondía ja …ja…ja ( era la tía ), al final de los doce acordes tía y reloj callaron .
Típica imagen de una familia que se acaba de enterar que no ha tomado las uvas ……..niños con la boca abierta , hombres con los brazos caídos a lo largo de su cuerpo , las mujeres tapando a la tía para que no cogiera frio , se le enfriaban los meados y la tía exhausta de tanta carcajada y cargaíta de anís empezó a dormirse allí mismo tirada en las escaleras .
Vaya por Dios , Nochebuena sin champán , Nochevieja sin uvas ¿ que le esperaba la noche de Reyes a la pobre niña ?
¡Ah! ¡Qué bueno! Me trae la añoranza de las navidades infantiles y me anticipa otras que ahora serán quizás algo menos risueñas, pero en familia.
Quizás tengamos poco, (hoy más que en aquella época que relatas), pero serán felices si estamos con los que queremos.
A mí también me trae el recuerdo de aquellas fiestas de mi niñez, cuando tan poco había y tanto parecía…
La que mejor lo pasó fue tu tía, seguro.
Un beso.