Un amigo me dijo que cuando se es bebé no se distinguen los sueños de la realidad.
Ya cuando creces te das cuenta de que algo no es coherente en ese mundo de ensueño, aunque solamente lo sabes cuando no estás durmiendo.
Coherencia, según el diccionario que utilizaba en el colegio significa armonía o relación lógica entre una cosa con otra, de forma que no haya entre ellas contradicciones; los sueños no tienen demasiada lógica…
Tengo la impresión de que es un lenguaje universal del pensamiento que la lógica no puede entender pero que el subconsciente si lo comprende (me encanta dar patadas al diccionario y la diferencia entre los significados de comprender y entender es al menos curiosa, siempre según mi viejo diccionario escolar).
Mucho, creo, se habrá pensado y escrito sobre ello, aunque no sé quienes ni como lo han hecho.
Hará un mes estaba yo recogiendo el desorden que tenía en mi habitación cuando, no sé por qué causa, mi mente se fue a otro lugar y comencé a recordar el sueño que había tenido aquella misma noche. Resulta que me emocioné, mis ojos se cubrieron de una fina capa de lágrimas y un cosquilleo me invadió la nariz. Me quedé sentado en la cama disfrutando de esa sensación o sentimiento totalmente desconocido para mí pero que ya había soñado unas horas antes.
Qué raro se hace, yo estaba tendido en el sofá y el pecho tenía un bebé, mío, no de mi propiedad, si no parte de mí, yo parte del bebé, regordete y arrugado, no se si niño o niña, da igual; estábamos ahí.
He pensado mucho sobre esta experiencia y no se que pensar. Creía que soñar era una actividad del cerebro cuya complejidad se basaba en las vivencias que hemos tenido, pero yo nunca he sido padre, bueno ya no estoy seguro. He llegado a pensar que tal vez no era yo el padre, si no el bebé. En verdad, qué se hace raro.
Es lo más parecido al amor que he sentido, puede que así fuera, un instante de único y verdadero amor. Yo no estoy preparado aún para eso; pero bueno, al fin y al cabo era solo un sueño.
En “Favoritos” tengo un Diccionario de Sueños. A veces me ayuda para entender los mensajes del subconsciente. Te digo lo que pone sobre tu sueño (bebé):
“Es signo de felicidad en el hogar. Si nos vemos convertidos en bebé indica que el soñador se sentía muy amado y atendido.”
A partir de ahí, materia para que reflexiones.
¡Qué bonito!
Soñar es un proceso mental que ayuda a analizar las vivencias del día a día.
No sé que pudiera significar este sueño tuyo tan bonito, pero yo siempre de dejo guiar por los sentimientos que me provocan los sueños. Tu sueño refleja felicidad, también que te sientes protegido y seguro (si te ves como el bebe), probablemente preparado para enfrentarte con los retos de tu vida.
Es un sueño muy positivo y me alegro por ti.
Onlythebestones
Sueños. Profundas realidades de los subconscientes que afloran a nuestras existencias para darnos significados más o menos ocultos. Sí. soñar que eres bebé es sinónimo de un estado temporal de felicidad y protección. Que sigas soñando… porque es señal de que estás sintiendo dentro de tí las emociones que afloran desde lo más íntimo y último de nuestra conciencia.
Los sueños a veces pueden hacer que realices tus sueños (ésta vez en el otro sentido de la palabra) en la realidad.
No sé, a mi me gusta experimentar mucho con el sueño.
Algunos fin de semana me levanto arbitrariamente. Al menos ahí siempre recuerdo el sueño. Pienso en él y me vuelvo a dormir, y vuelvo a soñar otro sucinto sueño.
Es raro, lo sé. ¡A veces he tenido 7 u 8 sueños en una mañana! Esos días, desde luego, ha sido mejor que levantarme y ponerme a ver la Tele, por ejemplo.
Un saludico