Buena pregunta es el plantearse qué es una chavalilla y cómo se puede ligar con una chavalilla sin que te deje “plantao” en el prado del Plantío. Pues muy bien. Una chavalilla, si está como un tren, digna es de poder perder el tiempo ganando minutos a las horas y dejando que los trenes sigan para El Escorial… que al final, cuando ya las horas del reloj se hayan desguazado de tanto girar y girar y girar sin sentido… veréis como la chavalilla que está como un tren engarza su brazo en el vuestro y se monta en la cabalgadura de vuestras fantasías. Y después qué… preguntaréis ansiosos por saber el final… Después de todo eso la chavalilla se habrá transformado en una chavala como Dios manda.
Abur (que quiere decir hasta la vista si es que el Sol vuelve a salir mañana que es cuando nos han dado una nueva cita). Los otros, los que se desesperan de vernos ligar, que sigan para El Escorial a realizar seminarios de meditación trascendental esperando que ellas caigan de las nubes para asarlas en sus parrillas. A lo mejor -con la ayuda de Dios- se dan cuenta de lo inútil que es su necedad.