¿Recordáis los versos de Calderón de la Barca que dicen: “¿Qué es la vida?. Un fresnesí. ¿Qué es la vida?. Una ilusión. Una sombra, una ficción. Y el mayor bien es pequeño. Que toda la vida es seuño y los sueños, sueños son”?. Fue una genialidad de Calderón.
Por otro lado, los norteamericanos tienen estadísticas para todo, y controlan absolutamente todos los hechos que pueden medirse. Uno de los últimos que he escuchado es que la canción “I will always love you” (Te amaré siempre) de Dolly Parton y popularizada por Whitney Houston es la más pedida y tocada en los funerales.
!Los funerales ! !Uf!. También en Literatura Universal hay obras muy importantes basadas en funerales y temas cercanos a ellos. Sobre todo hay una novela de Miguel Delibes, titulada 5 horas con Mario, que toda ella se centra en un funeral: el monólogo de una joven viuda ante el féretro de su esposo recién muerto. Es tan excelente esta novela (a mí me encantó tanto que la leí dos veces seguidas) que ha sido llevada al teatro en España, con grandes éxitos de taquilla…
A veces da miedo hablar de los funerales y yo por eso, una vez hablado de ello, te invito (una vez más) a hablar de la vida. Y una vez más (ya conocidos los funerales) insisito en que vivas, sueñes y disfrutes de las personas y las cosas que están a tu lado.
Hablemos una vez más de los caminos, caminante. Si eres caminante ya habrás comprobado que todo camino comienza con una puerta… y que hay muchas puertas que nos cierran cuando queremos pasar… pero también habrás comprobado, si eres caminante, que por cada puerta que se nos cierra hay dos puertas que se nos abren. Dos o cinco o muchas más. Así que echa la mochila al hombro y camina… y no te preocupes por las puertas cerradas (esos son caminos que no producirán evolución alguna en tu persona porque son siempre preámbulo de funerales). Camina a través de las muy numerosas puertas que se te abren. Esos caminos te realizarán como persona, te darán personalidad firme y te harán feliz.
Tienes razón amigo Diesel, las puertas que se cierran no aportan nada a nuestro espíritu, hay miles de puertas abiertas esperando a que se las traspase.
un abrazo pensador incansable.