!Retablo de las maravillas!. Soy un veinteañero recién estrenado en el campo de las emociones y con mis veinte años a bordo me embarco en la aventura del vivir, la mañana ha sido graqta y placentera, durmiendo al lado de Ella, la compañera de los dieciocho años elementales. Y luego, al llegar la tarde, nos hemos reunido Jeny, Daniel, Liliana y yo y nos hemos entretenido en pasear por el jardín hasta detenernos a tomar cafés y cocacolas con el consabido helado de vainilla…
Mientras tanto, con la ayuda de Mery, he podido articular el triángulo de la Carolina y darle una respuesta a sus angustias… pero el asunto ha sido todavía más complicado y ahora queda ella, toda la noche, llorando desconsoldamente hasta que la oscxuridad la ha dejado dormir con el profundo sentimeinto de haber vivido una romántica propuestas.