El verdadero amor comienza en el momento en el que no esperas nada en compensación por lo que haces. El verdadero amor es amar simplemente, sencillamente (y no hay que darle más vueltas a la cabeza). Lo que tanto “cacarean” (gallitos meditos a valientes) como “amor libre” no es más que una basura que todos conocemos como FORNICACIÓN. Sí. FORNICACIÓN repito y repetiré cuántas veces sea necesario para que lo sepan hasta los sordos. Como dijo Jesucristo: SI ME HACÉIS CALLAR HASTA LAS PIEDRAS DE LOS CAMINOS HABLARÁN POR MÍ.
No hay nada más despreciable y cobarde como el mal llamado “unión libre” tanto en parejas de heterosexuales como en las parejas de homosexuales de ambós géneros. La libertina “unión libre” es, y lo repito por tercera vez, sólo FORNICACIÓN.
Lo puedo repetir cuantas veces sea necesario pero lo voy a hacer por última vez: el “amor libre” y la “unión libre” sólo son FORNICACIÓN. Ya está. Más claro agua.