… Y yo me iré. Y se quedarán los pájaros
cantando;
y se quedará mi huerto, con su verde árbol,
y su pozo blanco.
Todas las tardes, el cielo será azul y plácido;
y tocarán, como esta tarde están tocando,
las campanas del campanario.
Se morirán aquellos que me amaron;
y el pueblo se hará nuevo cada año;
y en el rincón aquel de mi huerto florido y encalado,
mi espíritu errará, nostálgico…
Y yo me iré; y estaré solo, sin hogar sin árbol
verde, sin pozo blanco;
sin cielo azul y plácido…
Y se quedarán los pájaros cantando.
Juan Ramón Jiménez (1881- 1958) nació en Huelva, iniciando sus estudios de Derecho que abandonaría para abarcar por completo la poesía. Entre Moguer y Madrid, es decir, entre 1905 y 1916, se reconoce publicamente su estilo, recogido en sus Poesías Escogidas(1917) y en Platero y yo(1914) su obra más conocida y estudiada universalmente. También realizó tareas de crítico, faceta recogida en compilaciones como Españoles de Tres Mundos y Estética y Ética Estética, ambas de 1942 y 1967, respectivamente.