Ella tiene 16 y yo, con mis 18 a cuestas, me pongo a pensar… y a pensar… en cuál puede ser la manera de decirla que no pienso en otra cosa más que en su existencia. ¿Cómo puede ser que una belleza tan singular ande suelta por ahí?. ¿Acaso no tiene ojos el alba o la aurora o el tremolinar de las madrugadas?. No comprendo. No entiendo. No sé cuál es el camino exacto para alejarme de ella y entonces, perdido en las brumas de mi memoria, no me queda otra cosa sino acercarme al fuego ardiente de su cuerpo y quemarme allí…
Las rosas han florecido un poco más pronto esta primavera. Un poco más pronto para conmemorar sus miradas como dardos directos a mi corazón. ¿Cupido?. No es Cupido solamente. Es Cupido y Diana la Cazadora quiénes me han hecho caer en su fina tela de araña…
Me acerco lentamente, para no perder el silencio del atardecer mientras otros se están quemando en el mundo de las vanidades. No. Me niego a perder el tren de su confianza y por eso salto al vacío por la ventana del primer piso. Total, sólo es cuestión de caer sobre la alfombra verde del jardín y marcharse suavemente hacia el oleaje de sus ojos.
Ya está la luna sobre el cristal de las olas del mar. Ya está la noche ardiente en las arenas de la playa donde ella dejó un mensaje escrito que nadie pudo borrar. ¿O he sido yo el que escribió su nombre en la playa?. Sí. He sido yo… y la olas me han servido de fieles transmisoras. Después… Después queda todo en el silencio de una especie de sueño real irreconocible para los demás. Sólo ella con sus 16 y yo con mis 18 somos quienes sabemos explicar qué fue lo que nos pasó…
El cometa sideral que cruzó la magia del cielo estrellado aquella noche me hizo comprender que era mejor esperar bajo el cielo mientras los demás se internaban, avariciosos sin poder remediarlo, en las contrapuertas del infierno. Y aquí estoy, con mis 18, viéndoles entrar en esa especie de infierno de donde sólo van a salir chamuscados.
Me quedo pensando. ¿Estoy soñando?. No. Estoy despierto y noto su mirada a través de las brisas del mar…