Tengo en mi pecho encendida
una verdad que se asoma,
con su fuego me encandila,
con su llama me provoca.
Son tus palabras amor,
las que acarician mi alma,
las que me llenan de dicha
de sueños y añoranzas.
Un susurro trae el viento
cuando a mi ventana te asomas
y dices con sentimiento
“Eres mi amada, mi Rosa”
Es muy bonito y romántico, Wersi. La rosa siempre será, eternamente, símbolo del romanticismo.