Miro el reloj. Las oleadas de los pensamientos acuden, vienen y van, y me van dejando una escena mental caprichosa y disolvente. El silencio me envuelve el alma y hace de mí una sombra entre la sombra. Y entonces vuela…
Ha sido sólo un segundo de evanescencia… pero he visto volar el tiempo por la avenida de los almendros y aquí, en esta laberíntica calle de los silencios, miro el reloj y contemplo una hora sin nada. No hay nada más allá de la circunferencia que traspone mis ojos salvo el ruido de las chicharras en medio del transeúnte pasar de los segundos.
Y recuerdo un tiempo de granados en flor, con el aire húmedo de la venidera lluvia y tú trenzada en mi pensamiento como una epopeya de sentires. !Qué hora más silente!. !Qué tiempo más diluido en la memoria contigo embarcada dentro del alma!. Te regalé una granada viva, roja, destellante y tú me diste un besito en la mejilla y te pusiste alegre y viva…
Y recuerdo el paseo por entre las callejuelas que desembocan en la catedral !Qué hora más silente!. !Qué fugaz segundo de memoria!. La lluvia peinó tu cabello suelto y te abracé y te dije que por ti llegaría un día que tendría que vivir la muerte y tú te pusiste pensativa y me dijiste que no, que la muerte no tenía espacio entre nuestros besos. Y entonces, en esa hora silente, te besé.
¡Melancólicos retazos de la memoria, aquellos que llegan a nosotros en la soledad de un día de evanescencía! Me he sentido mirado por mi propio reflejo en el espejo de tu texto. Si, quizá tu segundo de evanescencia discurra en una calle de Madrid, y el mio aquí,en Telde, pero los contemplo como hermanos gemelos de un mismo sentimiento. Más allá de tan linda prosa la tuya, primero he de pensar que te entiendo a la perfección, y que eso me basta para dibujar la sonrisa en mi rostro y sentirme comprendido. !Y alegre! Me alegro de haber vuelto y leerte de nuevo. Un saludo
En tan solo unos segundos es posible volver a revivir momentos tan especiales como el que te ha acontecido a ti en esta hora silente.
Un gran abrazo amigo Diesel.
Para ti Ismael: me alegro de que estés por acá y de poder compartir literatura contigo. Adelante, compañero y amigo, que toda la sensibilidad del mundo nos sirva para ser humanos. !!Un abrazote y gracias por tu comentario!!.
Wersemei: !cuánta intensidad surge en la atmósfera cuando te leo y te veo por las islas internéticas!. Esta virtualidad de haberte “conocido” es algo que nunca olvidaré.
Diesel ¡¡¡ ..yo tambien estoy llena de satisfacción de haberte “conocido” por este medio, me siento orgullosa de tenerte por amigo, de veras.
😉 Muy evocador.
Sldos. Onlythebestones.
Horas de introspección en que los recuerdos afloran sin haberlos evocado. Se nos cuelan en el alma y en el pensamiento.
Maravilloso texto, Diesel.
Un abrazo.