La mañana se presenta hermosa. Los rayos del sol se columpian entre las ramas de los árboles del jardín. Entra dentro de la habitación un olor a perfume de rosas frescas. Alguien las ha dejado aquí, a pocos centímetros de la almohada. Alguien que está ahora preparando café. En la casa suena la voz de Nina Persson. Huele el café. Todo es perfecto para la calma. Nada por hacer. nada. Ninguna cosa.
Mientras desayuno pienso que hoy no tengo obligaciones. Es como si se me hubiese conmutado alguna pena judicial. Sin embargo quiero escribir un poema. Pero hay algo, hoy, esta mañana, que me lo impide. Algo que me dice que es mejor salir ileso. No. Ahora no. Ahora no tienes hambre de letras. Así que no compongo el verso.
En la calma de la casa cada segundo cuenta su particular historia de dejadez y de asepsia, Cada ángulo de la sala de estar está librando su batalla con la nada, Aparecen sonidos, palabras, principios de un poema. Pero no. Todavía no. El combate se celebrará esta noche. A la derecha estará el Poeta del Espejo. A la derecha el Puño del Hombre. Quien venza tendrá que combatir por el campeonato enfrentándose al Vacío.
Errata: Si a la derecha está el Poeta del Espejo no puede estar también a la derecha del ring el Puño del Hombre. Uno de los dos está a la izquierda. No hay ningún simbolismo político en el lugar que ocupe cada uno., Son dos combatientes deportivos y sencillamente deportivos nada más. Así que si hemos situado al Poeta del Espejo a la derecha del ring es obvio que a la izquierda está el Puño del Hombre. ambos combatirán esta noche para enfrentarse mañana al Vacío. Da lo mismo el lugar que ocupen en el ring (todo depende de donde se sitúe cada espectador del combate). Ahora, lo importante, es saber quien vencerá esta noche y cómo se las arreglará para enfrentarse al Vacío con posibilidades de triunfo. Ese es el mensaje de la página de mi Diario en esta mañana en que no tengo ninguna obligación que realizar salvo meditar sobre la presencia de las rosas rojas en la almohada y el humeante olor a café.
Quizás son las derechas de un mundo de sueños de múltiples derechas…espacio-temporal-relativo.
“Todo es perfecto para la calma”
Pequeño y contundente relatito que evoca calma, pero que nos deja con la intuición de que el combate se aproxima.