No creo que Dios me haya abandonado
solo que ha ido presto, donde lo llamaban
con tantos que lo reclaman en esta batalla
aunque mi vida se escapa,en El sigo confiando.
Las luces se disuelven en un mar de lamentos
mi mano busca herrante otra mano fuerte
que me sostenga a la vida y escape a la muerte
mas solo encuentro el aire y abatimientos.
Me he quedado solo,con mi ultimo suspiro.
A Dios quien sabe que mas lo ha demorado
la muerte en este campo no da respiro.
Tendido de cara al cielo solo y apesadumbrado
gotas de miedo y dolor transpiro
la muerte se acerca.No hay otra vida.Estoy asustado.
JOB-2008
Soneto de la valentía de tener miedo a la promesa de vida. Soneto profundo. Me hundo en tus versos y te aplaudo.
Muy bueno.