Deja que las nubes sigan despejando el cielo,
deja que el sol aparezca nuevamente,
y si hubo tormenta, eso es pasado;
mas si tu memoria no tiene destino,
deja que te guíen mis recuerdos
en el mar de ilusiones,
quizá descalzos en la playa,
jugando con la arena,
quizá besando tus ojos
y un te amo susurrado y a escondidas
lanzado sin medida;
¿Y las margaritas?,
quizá no florecieron, solo aparecieron
y no es el poniente mi sendero;
podrías correr para detenerme, podrías…
pero…
las hojas doradas siguen cayendo
y es por el mismo viento;
y lo que suena ahora
es el crujir de aquellas hojas secas,
doradas y secas;
me ves desvanecerme,
y no perdonas al horizonte
pues me lleva, me lleva lejos,
me lleva y no sabes a donde,
mientras tu silencio me clama,
yo…
yo te veo, te escucho, te siento…
y respondo a tu grito silencioso
que te amo…
Autor: Angelus…