Mañana de domingo. Día para el descanso… pero mi mente busca relajarse en las interioridades del Bar El Padrino, mientras las flores están abiertas y coloridas por el paseo del barrio.
Entro en El Padrino y me sale a recibir Andreíta, la escultural portorriqueña. Me sirve el café con un poco de anis… al fondo hay tres jóvenes que juegan billar y en la gran pantalla de la pared de enfrente están proyectando el partido de tenis entre nuestro Rafa Nadal y el rudo Nicolay Davidenko. Miro el resultado, El balear ha ganado el primer set por 6-3 y ahorta va ganando por 1-0…
Abro los Cantos de Leopardi que es el libro que he estado leyendo esta semana. Pero, de repente, entra en el local el amigo Braulio
– !Diesel!. !Qué alegría!. !Contigo quiero hablar un momento!. ¿Qué estás haciendo?.
– Leyendo los últimos poemas de Giacomo Leopardi…
A Braulio la poesía le suena a chino…
– !Tonterías, Diesel!. Yo solo quiero preguntarte si sabes ¿qué va a pasar hoy en Bahrein?.
– Pues no se, Quizás pasees por una de sus bellas calles con un sol resplandeciente y el corazón latiendo felizmente o quizás saltes por los aires despedazado por un atentado terrorista.
– Que no diesel… que no hablo de eso… me refiero al Gran Prix de Fórmula 1. ¿Quién crees que va a ganar?.
– No tengo ni idea. Sólo sé que Hamilton y Alonso tienen muy difícil este año el asunto. Me parece que esta carrera la podría ganar Vettel o Button y quizás hasta Massa o Raikonen.
– ¿Tú crees que Alonso no será campeón este año?.
– Este año no…
– Ya lo digo yo también. Nuestro “asturianin” será campeón el año que viene con Ferrari
En esos momentos aparece la esucultural Andreita y Braulio le dispara un piropo algo subido de tono
– Grosero. Machista. ¿Sabes una cosa?.
– No. No peleas contigo – dice Braulio- Diesel ¿verdad que nunca ha habido pilotas de Fórrmula 1 en automovilismos?.
– Te equivocas. Hubo los antiguos casos De Elisabeth Juck, Targe Florio y Giovana Amato… y ahora hay una española llamada Camen Jové que quiere entrar en Fórmula 1.
– Bah… tonterías, las mujeres solo sirven para fregar y para “eso”.
Andreíta se encoleriza
– !Machista!. ¿Sabes qué te digo? Que yo he conocido mujeres toreras enfrentarse a verdaderos toros bravos y a ti te he visto cagarte en los pantalones solo ante un becerro… como ocurre con todos los machista como tú.. !qué vetguenza de hombre eres!.
Llega en eso momentos el amigo Alfonso.
– !Mira Diesel!. Lo acabo de comprar en la Feria del Libro..
Me enseña un libro mientras se sienta a mi lado. Es Rabos de lagartijas de Juan Marsé.
– ¿Lo has leido, Diesel?
– Si. Es muy bueno. Te lo rcomiendo.
– ¿Y tú que lees?
– Termino ya con los Cuentos de Giacomo Leopardi.
– Cuando termines de leer me lo pasas…
– Sin duda. Ahora mismo… ya acabo de leer su último poema…
“De ver tu efigie viva me guardo ya esperanza, si no es tal vez cuando desnudo a mi peregrina estancia llegaste”…
Me despido de Braulio, Fernando y Andreíta hasta las dos en que he quedado con ellos para ver la Fórmula 1 de Bahrein alrededor de unas cervezas. Presto el libro a mi amigo Alfonso y salgo a la calle, paeando por la glorieta de las flores abiertas de color en color…