Una peculiar masa de madrileños es la compuesta por los universitarios de la Ciudad Universitaria (la Universidad Complutense de Madrid-Madrid). Aúí, antes abundaban, en tiempos de Franco, los izquierdistas porque !curiosa paradoja esta de España! mientras gobernaba la Dictadura de Franco (que era de derechas) los hijos de los obreros podían fácilmente estudiar en la Univesidad Complutense. Después, con la llegada al poder del PSOE de Felipe González y su “partenaire” Alfonso Guerra (!otra curiosa paradoja de los espaloles!) aúnque se autodenominaban Partido Socialista Obrero Español hicieron todo lo posible para evitar que los hijos de los obreros pudieran estudiar en la Universidad Complutense y, para ello, comenzaron a poner trabas imposibles de superar como elevar las tasas de matriculación en la Universidad Complutense,
obvligar a estudiar cursos de Selectividad tremendametne duros y, por si gura poco, tener que sacar notas muy altas para poder estuidar lo que cada uno deseara (con lo cual, si es que aprobabas, tenías normalmente que estudiar Carreras que no te gustaban o dimiritr y no estudoiar en laComplutense., Hoy, en día, por esas cuestiones del PSOE (que llegó a firmar Pactos con la ultraderecha tales como el Pacto de la Moncloa que yo llamñé en su día Pacto de la “Moncloaca” pues era mejor definirlo así y otras cuestiones “raras” y difíciles d eentende rpor el pueblo llano y humilde como la LOGSE y no sé cuántas leyes prohibitivas par alos mmás pobres, han conseguido que la matyoría de os estudiantes de la UNiversidad (salvando unos pocos que estudian gracias a que trabajan por el día o por l atard eo por la noche o cuando pueden) son “niños de papá y mama´2” que les pagan los estudios. Estos madrileños “com plutensis” no deben ser confundido con los “niños pijos ” y las “niñas cocacolas ” de Serrano. KLa mayoría de los “complutensis” actuiales vivien en domicilios bastante lujosos y están llenos de comodidades pero son familias desunidas pues estánsus padres están a favor de los divorcios, las separaciones, los abortos y otras cosas por el estilo que les producen, a sus hiujos, tremendas frustacioines an´kjicas. Es por eso qu ela mayoría van a la Universidad Complutense no a estudiar (salvo unos pocos) sino a intentar “ligar” (lo que normalmente acaba en fracaso f¡tras fracaso mientras fracasn tambi´ñenen los estudios). Compran libros, que llevan bajo el brazo, sólo para “aparentar” y guardarlos en slas amplias bibliotecas de sus “cómodos” hogares que, ppor lo comùn, sonn g¡hogares destruiidos. Ahora la mayoria d elos “complutensis” o son de derechas del PP o son “neutros” pues muchos de ells ya no quiern sqaber nada d epolítica y como tampoco quieren saber nada de cultura pues se encuentran cdon que tienen que repetir cursoi alño tras año hasta que se les acaba el “cupo” (porque hasta kleyes tan extrañlas han promilgado los del PSOE) y tienen que abandonar sin ha¡ber acabado sus estudios. Tienen una cultura media pero no muy elevada debido a que dan mucha mayor prioridad a las Ciencias Exactas (que no son exactas9 a las Ciencias de >letras y Humanidadew, con lo cual no son muy solidarios con las causas sociales (cuando antiguamente sí que lo eran),. NO le saptece tomar “apuntes ” en las clasess (salbvo unos pocos) y por eso. c omo su memoria está “más liada que la pata de un romano” por los problemas familiares no aprenden las leccin4s y viene supsenso tras supensoa de forma continua y continuada. En la escala social la moayroía es de clase alta salbovo los pocos que trqabajan para sacar sus Carreras (que sí lo logran gracias a sus propios esfuerozs) y qu e son der clkase media-.medias y clase medias.alta ya que los de clase media-baja, los de clkase bbaja y los de clase muy baja tienen imposible entrar a estudia ren la Coimplutensis !y todo ello, paradójicamente, grse lo deben a las “graciosas” leyes del PSOE que no tienen, por cierto ninguna gracia).
Los “niños pijos” y las “niñas cocacolas” viven en hogla calle Serrrano y otras calles paralelas… !allá por deonde est´ña la Embajada de los Estados Un idos. Viven en hofgares cómodos y d eclase alta, sontambién familias llenas de complejidades por el numeroso caso de divboriso, separacioens, abortos yu otras cosas más o menos visiosas, que los han convertido en infelices. solitarios y desgraciados a pewsdar de que intentan aparentar felicidad y alegrçía. Si les quitas el barniz de las “marcas” de sus ripoas (puews son muy aficionados a vivir de “marcas”
) se quedan más desnudos que un mono. Utilizan un lenguaje “cursi” que es una jerga absurda y bastante ridícula. Hacen esto para darse una personalidad que les distingan del resto de madsrileño. Esa personalidad es un verdadero desastre, No van en metro y usan autobuses o los coches de “papá” y “mam´”” pero lo que más les gusta es tener no una moto ni dos motos sino hasta tres moddos para ir “fardando” de chavalas. En realidad no se comen una rosac ay tienen miedo a que los madruileños “populares2 y castizos entren en su zos zoans (que llmaanAzules) porque enotnces se querdaríaqn sin chavalas por completo. Debvido a los problemas que les han acarreado sus padres algunos de ellos entran en la drogadición, el sexo indiscrimanado y falto de amor. A mí la verdad me producen tristeza. Ellos usan pegametnos y colas para el cabello y m uchas de ellas sufren de anorexia y otras de bulimia. So, genralmente, “fachas” pero no tienen ni “papa” idea de lo que es el verdadero fascismo y los hay que incluso se hacen neonazis sin tener ni idea de lo que es el fascismo. No confundir con los gays y las lesbianas de Chueca pues no lo son.
La zona de los madriul4ñós de Bilbabo, Quevedo, San Bernardo, Iglesia y calles adyacente (por donde hoy circulan bastantes vagabundos, gentes hambrtientas e inmigrantes que son vagabundos y hambrientos a la vez) tien una cula curiosa particularidad de ser muy “curioso2 y caen en sefguida en los chismes y los cotilleos. No lo hacen a propósito sino que el hecho de vivir en estas zonas les hqace ser asñi. Estos madrileños “curioso” gustan de acyudri a las bbliotecas y su cultura es la denominada “cultuara mosaico” o “cultura puzzle”. Acuden muchas veces a las bibliotecas solko para poder ligar ya que en las calles no se comen ni una rosca.
Son muy dados en acudir a las salas donde cantan los cantautores y donde se cuentan chistes de carácter “filosófico” y “político” y eso es lo que más aprenden de “política2 y “filosofía”; o sea, una polkítica de chistes y una filosfía tambi´ñen de chiste., La moyoría son de centro-iozquierda No caen jamás en los extremos pue slo de lo único que viven es de las “curiosdades”,m En este sentido hay unos pocos que son más “raros” todavía y se convierten en “ratones de bibliotecas”. Estos se dedican las 24 horas del día a vivir dentro de la s bibliotecas buscando temas “extraños” y “rqaros” como, por poner un ejemplo, “las formas gastronómicas d elos pulpos” y coas por el estilo. Se ufanan de ser “sabihondos” pero sólo saben, eso sí con mucha profundidad; el único tema que estudian e investigan a fondo sin cearr, Si les sacas de ese tema se quedan en “blanco” total. pues no concen más que ese tema. Los “ratones de biblioteca” son pol+iticamente indefindiod, Y ellos, tanto como los “curiosos” pululan entre las “minorías ” neutras. No suelen salir a las manifestaciones pues les gusta ver “los toros de lsde las barreras” parq chismear y cotorrrear sobre las causas poir la sque seotros s ehan manifestado.
Un tipo bastante curios de madrileñlos son los amantes de la Casa de Campo. Antiguamente etos mnadruileños iban allí a practicar el deporte más básico qu eexiste: !el fútbol! y eran “rebeldes2 que no aceptaban las impoisciones dictatoriales del Ayuntamiento. Pero aquellos “campestris” ya han desaparecido y han sido sustituidos poor otros “campestris” que tienen la manía d eelegir deportes tan raros como el piraguismo en lago, el tenis (que lo practican de manera multitudinaria, , el trote cochinero y el bisicrosss y, como son muy amantes de seguir las ordenanzas del Ayuntamiento, sñolo prqctican sus deportes en las zonas señalkadas para ello por las autyoridades, En contra d elos.-antiguos “rebeldes” estos “capestris” están domesticados. Tienen una curiosa manera de ser que es extravagante y paradójica. CorTrotan por la Carretea delCastilla (sobre asfalto) mientra slos antiguos “campestris” corrñían pkr el Camino de las Bellotas sobre arena que en invierno eran verdaderos cenagales,; después sighuen por el >Paseo de MOnistrol (muy cerca de la Cafeter´çia Restaurante dle Teleférico donde siempre toman suis cafés con leches mas bien “cortados2 porque son más bien “cortados2 una vez fuiera del deporte y, curiosament, en vez de ir a la Cafetería directamente siguen trotando por Prínicpe Pió,l Avenida de la Flrida y así hasta llegar al Paseo Pintor _Rosales. Una vez aquñí se montan en le Telefñerico que les lleva h, de nuevo a la citada Cafeter´ñia y entonces sí, entonces s eponen a desayunar caf´ñe con leche más tostadas o mojicones para superar su “cortedad” con las chavlas. Como son tan aficionados a lols deportes varios no suleen votar porque se les olvida hacerlo o porque cuando d4sean acurid a las urnas llegan fuera de tiempo y las urnas ya est´ñan cerradas. Alfguinos son del >PSOe yo tros del PP pero ya dihgo que no suelen votar de tan comido que tienen el “coco” con los deportes varios.
Los madrileños “retirados” son enemigos acérimos de los “capestris” socialmente hablando. Porque prefieren elpara su ocio el Parque del Buen Retiro de Madrid,. Los antiguos “retirados” disfrutaban muchos d elas barcas del laho del Retiro o echando migas de pan a los patos. Ahora los “retirados” han cambiado d ecostumbre y suelen pasear por la calzada que hay jhuinto al lahgo y en odnde hacen su “agosto” (sea el mes que sea) los tragafuegos, los payasos, los titiriters, los cuentacuentos, y hasdta los brujos y brujas que chan cqartas y las gitanas que len las palmas de las manos. Los “retirados” actuales suelen terminar su paseo en la Plaza del Ángel Caído y aunavez allí llegados se dividen en dos grupos: los “cñásicos” que se marchan hacia el Palacio de Cristal y los “modernios” que se van a los sitios escondidos a ddarse besos. Su iedología es irirgular y son de clae medias-media. No suelen ser extremistas. Hay algunos, que sonmá sbien los más jóvenes, que pasan de eso de los tragfuegos y del Palacio de Cristal y delos brujos y brujas y de los rincones oscurtos y se dedican, solmanetea, apatinar horas enteras en el Paseo de _coches del Retiro antes de que llegue la Feria del Libro. Suelen intenar ligar patinando pero mcuhos de esos se dan verdaderos “trastazos” tanto en lo físico cpomo en lo espirtitual. O sea que no solo no ligan sino que terminar con moratones por todo el cuerpo. Pewro tiene una virtud: son constantes y constantes y lo iuntentan cuantas veces sean neceasario porque generalmente las patinadoras están muy buenas y son muy guapas. Políticamente estos jóvenes “patinadores2 no se definen para nada y son los descnedientes de los antiguos “pasotas”. No les preocupa la política para nada sino las chavlas guapas. En esto estoy toalmetne de acuerdo con ellos y me caen simpáyticos.polcicías que custodian en orden en la zona y con quienes comparten desayuinos y algún que otro vino tinto, pues son más bien de vino que de cerveza. Cuando tienen ganas de sacar su valentía se reúnen àra discutir de temas más o menos cotidianos y un poco políticos y econímicos junto a la Estatua de Esparteros montado a caballo pues les gustan mucho los huevos. A saber: huevos con patatas fritas, tortillas de huevo, huevos cocidos, huevos a la bechamel, etcétera. Nunca dicen jamás a quienes han votado en las urnas por lo que es imposible saber su ideologia política. Sí se les puede conocer como bastante castizos y típicos de Madrid-Madrid.
En lenguaje madrileño-extremeño-popurrí amiga Carlota. Jajaja… me hiciste reír…
Debes estar muy enterado de todo esto, pero ¿en qué idioma lo has escrito? jajajaja.