LOS REGALOS DE LA VIDA
Como siempre, no sé si por buscar lo más difícil, o tal vez las hadas del destino me protegen en su calido manto.
Esto que os voy a contar es totalmente verídico.
Un día tal vez dos. Decían los médicos que le quedaban de vida a mi adorada tia delfina, ahora bien, también hacia cerca de un mes había escuchado la misma perorata, tan familiar, tantas veces, tantas muertes.
Cuando una persona querida o no, se apaga, sientes que se te encoge el estomago, no sabes si vienes o vas.
Y lo peor de todo; no sabes si estarás a la altura para ayudarla a pasar al otro lado.

Se marcharon a mejores sitios muchos seres queridos, compartí con ellos sus últimos tres meses, para mi es un numero macabro tres meses.
Tres meses estuvo en mi casa, cuando nunca me había soportado mi querida cuñada, antes de suicidarse. (ver: la nota que no dejó, es importante para mi)
Tres meses estuve con mi padre, cuando le recogí de ese frío hospital en el que se estaba muriendo de pena y me lo lleve a los mares del sur.
Zahara de los Atunes (no alucinéis) que ciertamente era un paraíso, le metí mano a la mezcla, arena, agua y cemento, con unos cuantos ladrillos (tendré que poner en mi currículo albañil y fontanera pues además de alicatar le puse una bonita fanega en plan sauna romana y por supuesto gracias al maestro, un colega, le hicimos un servicio en el patio, feten. Luego un sofá cama y a respirar
Salitre y jara, chumberas y jazmín y ver el mar, además para estos menesteres los gitanos y mi familia política era gitana son mejores que nosotros, respetan la edad y la enfermedad.
No me quiero ir por los cerros de Úbeda pero es vergonzoso, que se abandone a los mayores en gasolineras o residencias, para que sus últimos días que deberían ser los mejores de su vida los pasen en total abandono.
Me he desviado perdonadme;
Mi tita Delfina no consintió en tres meses cuidándola, es mas, tan solo la disfruté un mes, el primer día cuando por fin mi familia,( no se si os habrá pasado, el pensar que no erais de vuestra familia que os habían adoptado o veníais de otra galaxia pues lo que había alrededor era demasiado infame como para formar parte de esta de ello
y digo familia pero SABREIS MUNDO MUNDIAL SOBRE ELLOS, SERES RASTREROS, SOLO SE MUEVEN POR LA PASTA y no precisamente la italiana, malas ALIMAÑAS de las que saben tejer telas y aplastarte la esperanza contra ellas antes de que des cuenta.
Cuando por fin tuvieron la gentiliza de llamarme, maravillosa excusa que mi tía no quisiera molestarme nunca, aunque se estuviera muriendo.
Realmente se ha ido la persona a la que más me parezco,
Hemos hecho un pacto en su lecho de muerte y eso es milagroso,
porque hablo en presente porque se ha quedado a mi lado es una presencia muy fuerte muy autentica he intenta ayudarme. Seguramente por ello estoy tan perdida, porque aun a pesar de ser iguales espiritualmente hablando, en lo demás, o sea todo, somos muy distintas. Cuantas veces me ha dicho mi tia; sobrina de verdad que hay algo en ti que no llego a entender, ahora ya lo entiende.
Os voy a describir una experiencia que tuvimos mi marido y yo a las pocas horas de fallecer.
Era de noche y lo normal es; que hubiéramos ido a tomar algo, de hecho fuimos y a mi se me apetecía una copa(mi tía ni bebía ni fumaba), Joaquín me la pidió y fue llevármela a la boca y sentir algo…inaudito como si fuera veneno, tuve que salir a la calle a respirar y acto seguido note como me decía; ahora iros al parque (su parque preferido al lado de su casa lleno de fuentes multicolor y flores), fue alucinante tanto colorido, yo le hable de mariposas mientras dejaba de respirar y había cientos en el parque, millones de flores de toda la gama de colores, de pronto me quite las zapatillas y curioso, todo estaba seco y hacia calor pues en su lecho de muerte de hable de andar descalza por el césped húmedo gracias al rocío del amanecer, y estaba todo mojado (no habían regado, lo pregunte) y era muy temprano las 11 de la noche. Mi marido tan aficionado a los puros no fue capaz de encender ninguno, los sacaba, les daba muchas vueltas y los guardaba con un escalofrió.
Perdonarme lo que os iba, mejor dicho voy a contar es un regalo y una situación de risa
El día antes a su muerte era domingo y fui a la cafetería, pregunte por los servicios y realmente estaban lejos en la zona de consultas externas , desierta en ese momento, pues bien, no se porque siempre me voy al último, y cuando se ha cerrado la puerta, horror veo que no hay picaporte, como soy poco de observar y mas de actuar, miro por arriba hay un hueco pero, lo mismo me caigo y encima me rompo algo, se me olvidaba, ya había gritado con resultados negativos, la puerta estaba cortada por debajo, y yo ilusa de mi me creo que todavía tengo 14 años porque si no, no me explico como se me ocurre meterme por semejante hueco, que cuando llegué al pecho o tetamen lo atore y me quede atascada, gritando ahora si; bien alto, socorro, que mi tia se muere y aquí no viene nadie hasta mañana, una odisea, menos mal que de pronto oigo una voz de mujer, “estoy salvada”.
Me dice: nunca se me hubiera ocurrido ir tan lejos tengo pavor a quedarme encerrada, pero me apetecía, echar un pitillo donde nadie me viera, fue mi salvación por tres lados.
Me trajo un manillar de otro servicio y sorpresa resulta que era poeta, de allí de la tierra de mi tía con una vida muy similar, me regalo dos libros de los cuales, escribiré algún verso, aunque no me atrevo sin su autorización, lo cierto es que me dio la herramienta, porque aunque yo sea imaginativa, se me agotan los prados de fresca hierba y los acantilados.
La ultima noche de mi tita además de versos de mi cosecha, “ojala me acordara”, tuve el privilegio de hablarle de su vida de oveja negra, por no consentir casamiento interesado, su escapada a Alemania donde estuvo 40 años trabajando sin cesar, se quedo solterita, pero ella decía muy ufana que había disfrutados de hombres. Pero el que la enamoró, era del pueblo y se lo negaron. Y para un mal partido; “anda niña déjate….”
Los versos estaban dirigidos a ella.
Como persona aferrada a la vida, luchaba y quería respirar.
Y yo la decía llevar tiita déjate llevar, tu cuerpo ya no sirve, “vi. sus entrañas en los pañales”, tu cuerpo te impide que vallas a montar a tu caballo que te espera, déjate llevar.
De pronto me llamo mi marido que a veces es una especie de chaman y me dijo, descansa y con ello ella descansara, me quede dormida profundamente, de pronto un frío helado no era natural era un frío de ultratumba (ahora entiendo el significado)me hacia temblar y los dientes castañeteando sin parar, la acogí, todavía respiraba, le dije tía voy a cerrar la ventana que aquí hace mucho friiiioooo, cuando la cerré, la note tranquila respirando, cada vez mas y mas despacio, la cogi las manos y la di fuerza, mucha fuerza desde muy adentro, hasta que dejó de respirar, como un animalito, tranquila protegida, ni siquiera expiró, sencillamente se fue.
Llevaba sin dormir una semana pero no me importó, busque un tanatorio, prepare todo, llame a todos.
Y ahora todavía, esa. no familia de Ciudad Real siguen haciendo daño, yo paso de herencias, he hecho algo bonito porque me vienen, que si fulanito ha dicho, estoy por renunciar y que se las apañen, yo solo recogeré las cenizas de mi tia y se las echaré una noche de luna llena,,desde un bote al atardecer al mar