Dejas la mente en blanco
para verme blanca como
el azúcar de tu ensoñada
poesía buscándome más
allá de lo perdido.
Y me vistes como a la reina
de tu conquista adornada con
flores de tu jardín, para sentirme
mas tuya que ayer, para sentir
que vuelves a ser amado.
Y sin embargo, los días pasan,
las horas corren como liebres
hacia su lugar y yo triste pero no,
pienso en lo que fui y río con lo
que soy.
Entonces es cuando estoy seguro de que tu mente en blanco se llena de arcoiris, cuando ríes con lo que eres y corres en pos de la ensoñada azúcar de las flores del jardín. Muy bueno, Nasia, como siempre…
Es como estar en un pedestal y sentir caer la lluvia…