Normal

Ahora que en estos últimos tiempos está tan de moda que en todos los medios de comunicación social se diga que “es políticamente correcto” o que “no es políticamente correcto” decir esto eso aquello o lo de más allá, no sé si lo que voy a escribir a continuación es políticamente correcto o no lo es. Sólo sé que es una perogrullada (y la que avisa no es traidora) pero que me parece que es una verdad bastante absoluta. Veréis. Dicen que todos somos, por activa o por pasiva, animales políticos. Estoy de acuerdo aunque en política no sé bien de donde soy.o no.

De política no sé mucho y yo diría que sé mas bien poco pero como lo que voy a decir es una perogrulla (ya os lo avisé) pues lo digo y ya está. El caso es que yo sé que tengo la sangre roja y el corazón en la izquierda. Osea normal. Como la inmensísima mayoría de hombres y mujeres. Pero me entero de que hay personas que se ufanan diciendo que pertenecen a los de “sangre azul” (quizás no sepan que tener la sangre azul es un gravísimo síntoma de enfermedad mortal) o de que “tienen el corazón en la derecha” (quiizás porque no saben que tener el corazón en la derecha es una gravísima anomalía fisiológica).

Bueno ya dije que lo que iba a escribir era una perogrullada y lo avisé pero estoy segurísims de que si en el examen de Biología digo que los humanos tenemos la sangre azul y el corazón a la derecha entonces apaga y vámonos que seguro seguro seguro que me dejan suspendida hasta septiembre. Repito que no sé si es políticamente correcto o no es políticamente correcto decir que tengo la sangre roja y el corazón a la izquierda como la inmensísima mayoría de los hombres y mujeres. Pero como resulta que es verdad… me importa un comino si es políticamente correcto decirlo

Un comentario sobre “Normal”

  1. Las cosas pueden ser políticamente correctas o incorrectas dependiendo de quién te escuche. Pero dado que hay libertad de expresión, ¿por qué preocuparse por esa posible corrección o incorrección? Tú tienes derecho a expresarte, siempre que no faltes a nadie, y tus reflexiones son tan respetables como las de cualquiera.

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si, lo vi pasar el lunes. como siempre, jadeando y arrastrando el cuero que aun no se había enrredado en el costillar. opaco. cierto. algunas cuadras hasta parar, amarillo de polvo, viendo a travéz del brillo de sus ojos acuosos. en relidad nunca habia pensado en esto pero sabía por que estaba allí.todavía le quedaba algo de tiempo. como siempre. era vano apresurarse. y el riesgo era cero. imaginó lo que sucedería y todo se paralizó. tendria que esperar un poco más. como cada vez. de suspenso en instante volvió a llegar a la esquina sin que nadie lo supiera. sin que nada pasara.

Un comentario sobre “normal”

  1. Nunca pensamos que en realidad nunca pasa nada y sin embargo es normal ver que las realidades de nuestras milenarias presencia en las esquinas amarrilleadas por el polvo nos cnvierten continuamente en realidades diferentes. Nunca pasa nada porque todo está pasando continuamente y de manera multiplicadora. Y tan exhaustivos son los cambios diarios en nuestros espíritus que paralizamos el desconcierto y creemos que nunca pasa nada. Muy profundo tu normal texto que me parece verdaderamente hondo. Tan hondo como ser opaco en las translúcidas esquinas de nuestros propios barrios.

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