Pequeña gota de rocío
que, trémula y palpitante,
brillas al amanecer
sobre el pétalo del lirio.
Tú eres todo un preludio
de la pasión y el delirio.
Naces como un cantar
de perlífero “quejío”
gitano en tu sentir
de libérrimo albedrío.
Titilas en el festón
de la cúpula de armiño
donde la sencilla flor
se culmina junto al río.
!Gota sublime en la transparencia!
!Tienes las páginas de un libro
impresa en tu resplandor!.
!Y luego, cuando nace el sol,
lloras como llora un niño
y te escondes en mi corazón
para llenarte de olvido!
NOTA PARA ALBERTO. Te he enviado un mensaje privado. Es para ver si puedes cambiar de Sección un texto que lo ubiqué en lugar inadecuado.