Si cito una sóla sílaba, una sóla nada más, te nombro todo completa. Sí. Ya está. Eres Sí… nada más y nada menos que Sí… Eres el Sí del Silencio y la Simpatía, el Sí de la Simetría, la Sinceridad y el Sinnùmero. Eres el Sí de la Simiente. El Sí de la Sinfonía. El Sí de lo Singular. Eres el Sí del Sisón. El Sí de la Sirena y el Sí de la Sinéresis. !Sí!. Eso eres tú. El Sí de la Silueta. Eres el Sí del Silbido. El Sí de la Significación. Eres el Sí del Siglo… nada más y nada menos que el Sí del Siena artístico y el Sí de la Siguiriya con toná y soleá de la Andalucía. O el Sí de la Sierra Ecuatoriana. O tal vez seas, solamente, el Sí de una Signatura escrita en los pentagramas de Sibelius para ser Siete Sinfonías.