Ser consciente de lo que sucede tiene sus ventajas y desventajas,
mi grado de consciencia es alto, por eso me he vuelto más resistente al dolor,
porque ya las cosas dejaron de sorprenderme,
porque las cosas se vuelven concretas y reales.
Ser consciente me ha hecho madurar, me ha hecho vivir al día,
no planificar, ni mirar al futuro, sino construir mi presente que se convierte, en segundos, en mi pasado constante.
Ser consciente también me agobia, sé lo que pasa a mi alrededor, no hace falta que me lo dibujen, ni que me lo expliquen, porque ya lo sé.

Ser consciente te vuelve, en ocasiones, vulnerable. Te hace actuar en lugar de pensar, tal vez con el afán de probar tu nivel de consciencia, tal vez para darte cuenta de tu capacidad de soporte, de saber que eres consciente, pero quieres ser inconsciente.
Ser consciente, me ahorra el sufrimiento que no quiero aguantar, que ya lo viví una y otra vez, que ya me cansé, porque me creí capaz de soportar una vez más. Ahora es diferente, hay circunstancias por las que debería sufrir, pero no quiero soy consciente que si me expongo saldré mal, eso es un hecho. Pero mi nivel de consciencia, amortigua el dolor y reduce el sufrimiento.
Ser consciente, ha reducido mi capacidad de exposición frente al otro, de no mostrarme interesada o mostrarme a mi misma, simplemente mi superficie, un breve rasgo de lo que soy.
Ser consciente de mis actos me ayudan a asimilarlos como parte natural de mi vida, ahora son parte, más no cambian el rumbo de mi vida.
Ser consciente me lleva a vivir al día, no me gusta pensar en el día siguiente, porque estaría desperdiciando el hoy.
Ser consciente, me lleva a entender que los humanos somos frágiles, pero que eso es reducido con la consciencia. mi consciencia fortalece mi espíritu.
Ser consciente, me invita a ser incrédula, a tomarme la vida menos en serio, a no atesorar nada, a no juzgar la vida de otros ni la mía, a no amar sin medida, porque eso desequilibra mi consciencia. A vivir mi consciencia al máximo, a saber que estoy viva y que eso, es de lo único que estoy consciente.