Somos tú y yo, otra vez de nuevo cuerpo a cuerpo y frente a frente Liliana, intentando comprendernos sin tener más motivos que querer seguir viviendo nuestro propio romance. Somos tú y yo, Princesa, con nuestras lógicas diferencias y a veces inconexiones pero esforzándonos cada día más en seguir entendiéndonos nuevamente y repetir expresiones de vida ahuyentando fantasmas de muerte. Somos tú y yo siguiendo juntos el camino. La solución no es nueva. La aprendimos bien. No es cuestión de hacernos concesiones voluntaristas sino seguir sintiéndonos unidos en algunos momentos de soledad y en algunos momentos de compañía…