Urge la noche respuestas
a un consejo de sabios,
conjunción de mentes dispuestas
a descifrar el presagio
de inocencias confusas
que saber quisieran
el porqué de la desidia
de las mentes que imperan
abocando a la Madre Tierra
a un final inminente.
Señores en lo alto de sus púlpitos
vociferando mandatos,
apresando las conciencias
envueltas en engaños.
Mandatarios sin escrúpulos
ávidos de poder y dinero,
robando el pan de la boca del hambriento
secando los frutos, erales y fuentes.
El niño llora
succionando el pecho seco, ajado y doliente,
ojos inundados de lágrimas,
alimento de moscas infectas.
Dos mundos alejados entre si.
Opulencia y pobreza.
¿Hasta cuando ha de durar todo esto?.
Todo esto sólo finalizará cuando la Conciencia triunfe sobre la sinrazón. Los hombres no entienden por qué las mujeres tienen tanto contenido en su interior. El día que lo descubran definitivamente, si no es tarde, será el triunfo de la Conciencia.