El Relojero de Manila

Mi amigo el Relojero de Manila no es filipino. Tiene ya la larga distancia existencial de los 95 años de edad (que acaba de cumplir hoy mismo) y es un alicantino (nacido en Elche) que desde hace muchos años está afincado en Murcia tras haber vivido en el Madrid de los años 30 del pasado siglo XX. Se llama José Gomariz y tiene tantas historias en su todavía lúcida mente que viene a ser como un libro abierto de la vida. Cuenta y narra sucesos acontecidos durante los años de la República (también de la Monarquía de Alfonso XIII) y sobre todo de las trágicas escenas de una Guerra Civil que dejó marcada toda su juventud. Es el Relojero de Manila (poseía una relojería en ese barrio de Alcantarilla) mucho más que un abismo vital. Es José el Relojero toda una experiencia de acontecimientos que alarga en su memoria mientras mi otro amigo Víctor (que sólo tiene 20 años de edad)y yo escuchamos con atención lo que él interpreta como un análisis secuencial de la historia humana. Sigue Leyendo...

Frío

Una canica rodando por el grés,
el hielo del vaso
antes de ahogarlo en ron,
el saludo del ajeno
en el ascensor del cortinglés.

Sacar a la perra de noche,
Salir de la ducha,
La escarcha que rasco
por las mañanas
del cristal del coche.

Entre dos mares (Letra de “Platero y Tú”)

No puedo concebir que tú seas tan idiota,
el triunfo del poder siempre es una derrota;
te has “quedao colgao” y la verdad es otra:
El mundo es de papel y con papel se compra.
Si no me gusta así tiro de la cadena.
No sufro por llegar, sé que nadie me espera.
Y tantos homenajes por personajes muertos:
primero el puñetazo, luego el monumento.

Perdido entre dos mares, sin viento, sin bandera.
No quiero escaparates: quiero la vida entera.
Soy un bufón errante buscando una princesa.