Llego el mudo y me hablo de su mundo
Llego el ciego mirándome con miedo
El sordo tapo sus oídos del estruendo
Que todos provocaron gritando sin consuelo
No podrás encontrar ni siquiera buscar
Sin comprender y aceptar el hecho
De que
Hay que ser ciego para ver
Sordo para oír
Y mudo para hablar
Nunca te podrás encontrar
Pues perdido de hallas

Madre salada templadora de corazones
tu liquido bendito inunda mi piel
ya me cerca el mar los pezones
su frialdad me reconforta
me introduzco en su vientre
me envuelve en suave unión
ya no hay frio, todo es placer
vuelvo al vientre de mi madre
sensación maravillosa
madre salada templadora de corazones

Esta mañana volvieron las nubes a atormentarme
Lucia un sol prepotente, cuyos rayos herían mi orgullo
Y lo triste es que a pesar del sol
Las nubes no me dejaban ver la luz
Ayúdame amigo a desgarrar las nubes
Que me llegue algún rayo solar
Y tenga el privilegio de la reconstrucción
Que las heridas del alma no sanan
A menos de que se las de calor
Caliéntame el corazón
Que herido de muerte se haya

Todos en coro que la letra suena,
y suena asi…

Un dia en este mundo desde
tu partida he de estar feliz,

feliz un momento, que mas da
recordarte felicidad me da,
recordarte alegria me da,
recordarte melancolia aveces me da.

Un dia en la mañana
trajiste todas las memorias
que un sabio puede guardar.

Tocaste mis manos y abriste
mi corazon; aquella noche
lloraste un coro hermoso.
Majestuosa te elevaste entre
las nuves y no dejaste de aletear.

Eres mi maestra, no te puedo
olvidar;

Aqui si te extrañamos,
en esta tierra si te recordamos,
y si tu no nos puedes
recordar, que mas, que mas
se le va a hacer.

Aqui si se te extraña,
todos los dias miramos al
ocaso por si vuelves.