Del 22 al 23 de septiembre, abrimos hasta la madrugada.

La noche perdida, entre la masa de mente en blanco que deambula por el asfalto.
Toda una corriente de suciedad sale a ver la función, preparada para abrir las puertas al engaño y la locura.
Un buen cebo para el pez orientado por un papel con desdibujadas lunas.
Un año más repleto de sillas acomodadas, que no aguantan ni el peso de su estupidez.
¡Oh!, ¡cuánta cultura! , ¿quién habría hecho arte con tamaño montón de basura?
Se dispersa con premura a los alborotadores, que desean lanzar sus gritos, como espadas, contra edificios encendidos con anuncios, que venden las ideas vomitadas de políticos sin escrúpulos y prepotentes empresarios de la nada.
En la Gran Vida, un titiritero comienza el cuento. Sin perder tiempo los policerdos reprenden la función, por no estar programada; la agenda de la ciudad es apretada. Sigue Leyendo...

Diario de pez

20:45
Deambulo por la calle sin soltar el cigarro y veo miles de colores a mi alrededor
pidiéndome a gritos que me los lleve a casa.
Esta indecisión me está matando: rojo, azul, verde, negro, blanco;
¿cuál me apetece?… naranja.
El humo casi no me deja respirar.
Con tantas tonalidades no es sencillo; tendré que elegir, ya cierran.
A ver… este me va bien con las escamas, pero resalta demasiado con el amarillo.
Que dura es la vida cuando se es pez y hay tantos anzuelos para morder.

Anima Mundi. Susanna Tamaro. Puntuación: 8

Estábamos a principios de diciembre. La sala daba a un balcón. Haciendo caso omiso del frío, abrí la puerta y salí afuera. Aunque sólo atardecía, el cielo ya estaba oscuro y cuajado de estrellas, soplaba la bora y lo limpiaba todo, las antenas vibraban y asimismo los cables que las conectaban con los aparatos, una sinfonía de cables y chatarra. Más allá de la ligera cortina veía a mis compañeros, el suelo de la sala era de mármol, brillaba reluciente desinfectado como una lápida de cámara mortuoria, ellos seguían corriendo en círculo alrededor de las sillas. Veía las muecas, los guiños, las torpezas. Para mí era ya todos calaveras, mandíbulas, tibias. La confusión ya los envolvía, los envolvería para siempre. Sus vidas se me mostraban como el plano de una casa en construcción. Había cimientos y paredes, tuberías de agua y el tejado. Yo lo sabía todo sobre su futuro, harían todo aquello que era necesario hacer. Ellos estaban allí dentro, a la luz, al calor, se llenaban la boca con palabras vacías.
Yo estaba al otro lado del cristal. Solo, en la oscuridad, con el frío de la noche alrededor. Sigue Leyendo...

No sabes cuanto me gusta amanecer contigo

Los rayos de luz entran por la ventana,
signo de que esta amaneciendo.
Empieza un nuevo dia,es temprano aún,
reconozco que no me gusta madrugar….
me levanto de mal humor por las mañanas.

Pero todo cambia cuando tu amaneces a mi lado,
ese instante me llena de vida .
Te comtemplo,me encanta mirarte
tienes los ojos cerrados a la luz y la mente abierta a los sueños,
sentir tu olor…te acaricio,pero no quiero despertarte,
me encanta cuando despiertas,me sonries,me besas..
que mejor comienzo del dia que con tus besos?
No sabes cuanto me gusta amanecer contigo.
No sabes cuanto te quiero.
Este es el mejor regalo que me a dado la vida
amanecer contigo………Te quiero Sigue Leyendo...