Llevo casi dos semanas padeciendo un ruido infernal. Después de unos meses sin ningún vecino en el descansillo, ya que de los otros dos pisos se han trasladado sus ocupantes (con los que, por cierto, me llevaba estupendamente y ha sido una pérdida el que se hayan marchado), ahora han llegado las obras. En el piso que está pared con pared con el mío hace casi dos semanas, como antes decía, se han desatado todos los furores del Averno. No parece posible que seres humanos puedan manejar un aparato que lo produzca en tal cantidad y tantas horas seguidas. Me pregunto si contratarán para su manejo a sordos, o si habrán perdido ese sentido a fuerza de manejar el trasto. Se alternan los bramidos del aparato en cuestión con los martillazos o lo que sea que utilicen como guinda del pastel.
Archivo por días: 11 febrero, 2008
A Beatriz Emperatriz
De cuando viví la dolorosa separación con mi hermana.
Desde el piso de “c/Alcalá, 180” al cielo.
. Bea, bea, bea, bea.
Te quiero, mi vida, te quiero tantísimo… La parte de mí que desconozco.
. La parte de mí que desconozco tiene aroma de manzana, la misma verde manzana que envuelve a la madre que es mía.
La parte de mí que desconozco está dentro y fuera.
Siempre fuera y siempre dentro.