Yo… no puedo…

No puedo decirte adiós,
aunque lo quieras con desespero,
en un momento cerrar lo nuestro,
aunque lo quieras, y lo desees,
yo… no puedo…
No puedo decirte adiós,
así sin más, romper los lazos,
de esta atadura que nos unió,
que me hace daño,
que me da vida, que me la quita,
mientras me miras…

Toby el perrito bohemio.

Érase una vez ( así es como empiezan los cuentos). A lo que iba…..Érase una vez una feliz familia que vivía en una casita en medio del bosque. Padre, madre , sus dos bellas hijas y un perrito llamado Toby.
Toby es pequeñito, blanco y liso, blando como un peluche, y tiene unos ojos sinceros y transidos de amoroso espíritu. Está muy unido a su dueño, ( le llamaremos Luís). Luís es escritor y se pasa muchas horas delante de su máquina de escribir. Tiene muchos libros de cuentos a sus espaldas.
El animal siempre a su lado, mira expectante lo que su dueño plasma a través del teclado. Parece en tender lo que ve, si no le gusta se lo hace saber a Luís con un ladrido. Al final él se daba cuenta que los consejos de Toby le dan resultado, por ello siempre le hacía caso. Sigue Leyendo...

Y se marchó

….Y dijo.
_ Asunto arreglado, ya no hago ninguna falta aquí. Las aguas llegaron a su cauce.

Hacía días que intuía el problema que se desencadenaría. Al final así fue como sucedió.
El asunto casi se le va de las manos. Se entrometió más de la cuenta y casi lo echa todo a perder.
Sabía que su proceder no era el más indicado, siempre andaba metiendo la pata en todo.

Lucero hermoso (Nana breve)

Duérmete lucero hermoso duérmete,
con las estrellas que te acunarán
y que a tu oido susurrarán
palabras dulces que esos ojitos harán cerrar…

Duérmete lucero hermoso duérmete,
como la luna que arriba está
y así tranquila vigilará
que tú dormido te has de quedar…

Mi mundo.

Mi mundo fluye tenue,
a tus pies de ángel,
sintiendose perdido,
si tus alas le faltan.

Quedo sólo en la distancia,
olvidado si no te encuentro,
buscándome a mi mismo,
desconociendo mi posición.

A mi gaviota

Siempre he soñado,
conocerte en realidad,
siempre creí en tí,
y ahora apareces,
en mi gris vida,
alma gemela.

Somos dos mundos,
soñadores de verdad,
anhelantes de amor,
que existimos paralelos,
confluyendo suavemente,
en una bendita pantalla.