Un nuevo horizonte.

Y en este pasar de las horas en el tiempo,
todo se detiene…se relaja. El ritmo se acompasa.
El desparpajo y la ilusión de los años de juventud
se vuelven melodía encadenada.
Que suavemente te lleva por el camino de la vida,
que en estos años de incipiente madurez,
te dispones a vivir más pausadamente.
Sin estridencias y en Paz contigo mismo.

Satisfecho por lo andado y lo vivido.

Princesa.

Me levanto feliz esta mañana,
ayer la vi y me llenó el corazón
al hablar con mi linda princesa,
sentí volar miles de mariposas.

La alegría desborda mi espíritu,
y escribo sobre las flores bellas,
paisajes cercanos multicolores,
sentimiento de esperanza plena,

A Ti

Desnuda en mi locura correría por la playa sin fin, correría y correría hasta cambiar la vida por un segundo, solo por sentir el beso que voló y no me diste. Te ruego que marques las huellas de tus pasos, para siempre ver tu camino.

El enterrador.

En lo alto de una colina,
tocando casi el azul cielo,
en comunión con el mar,
se encuentra el cementerio,

Siempre he trabajado en él,
empecé con catorce años,
todavía sigo a mis sesenta,
lo tengo en mis entrañas,
desde niño lo he disfrutado.

Con la televisión apagada y un libro abierto…

De cada diez personajes que aparecen en la televisión, cinco me parecen lamentables, cuatro simplemente horrorosos y el último de ellos se me queda en lo esperpéntico. De cada diez personajes que aparecen en la televisión no me queda más recuerdo que el aparato completamente apagado. Y entonces abro un libro y leo algo como “se querían, sufrían por la luz, labios azules en la madrugada, labios saliendo de la noche dura, labios partidos, sangre, ¿sangre de dónde?. Se querían en un lecho navío, mitad noche, mitad luz…” (primera estrofa del poema titulado “Se querían” del poeta Vicente Aleixandre). Y entonces, con la televisión completamente apagada y el libro completamente abierto, me doy perfecta cuenta de la gran diferencia que existe entre ser patéticamente “muy famoso” y ser sencillamente “muy inteligente”. Sigue Leyendo...

Te quiero Cmo nunca y para Siempre

Mi vida es como… como una montaña rusa… ahora arriba y despues hacía abajo… aveces todo te sale bien, no hay nada que pueda estropear un momento, otras sin embargo piensas que ya nadie puede poner una solución en tu corazón.
Javi, eres… ¿Un amigo? ¿Un novio? ¿Un Ligue? No lo sé… solo sé que ahora estamos juntos y que te quiero más que a nadie, se que no vas a leer esto, ya sería mucha coincidencia, pero necesito espresarme… Decir que me muero sin ti pero que a la vez me desgasto, que contigo o sin ti mis penas no tiene remedio, pero por lo menos cuando estoy contigo todos los problemas desaparecen, aunque luego vuelven. Estamos hechos el uno para el otro porque los dos tenemos muchos problemas. Pero yo no puedo seguir así, te necesito, necesito de tus besos, necesito decirte a la cara que te quiero, no ocultarle nuestro amor a nadie… aunque se que eso es imposible. Sigue Leyendo...

Quiero y no puedo

Quisiera olvidarte y no puedo.
A cada paso, en cada aliento,
En cada esquina
Y a todas horas
Veo tu imagen
Siento tu sombra
Rozar mis cabellos,
Invadir mi memoria
Estallas dentro de mi
Con furia tormentosa
No encuentro un lugar
Donde guarecerme,
Me acosas, te huyo,
Me agitas…no te quiero.
No puedo llevarte en mi recuerdo.

Dolor de aullido

Se cierra el interior de los párpaods de la vieja criatura y un aullido de hoy se hace pasto del futuro. En vano ensaya su conciencia de lobo herido la desaparición de su especie y el animal, al pie de la colina, desnuda la rama de sus heridas con el alimento tomado de entre los sembríos, en medio del polvo y la plaga de mosquitos que fluyó del río.

Se cierra el interior de los párpados de la vieja criatura y el lobo está ahora tumbado aquí, sobre la colina, en su peregrinar errante y herido, como si el tiempo hubiera dado ya la última hora a su especie en peligro de extinción. El lobo piensa en la supervivencia y la sueña pero la vida se le está escapando… Sigue Leyendo...