Llámame crío,
iluso,
enganchado,
travieso,
estúpido,
quemado,
raro,
frío,
inmoral,
fino,
egoísta,
absurdo,
complicado,
cielo.
Pero llámame
¡Qué presencia de tiempo sin distancias!
¡Qué dos corazones enhebrados como hiedra!
Un fulgor de llamarada en los clamores
perpetuando tanta lluvia de sentires.
Una especie de estar siempre despiertos
en esas albas donde nacen las caricias
y un piélago de palabras bellas
cruzando siempre el puente de los silencios…
¡hasta estallar en una tormenta de verbos
respirando mundos nuevos en el amanecer!