Cerrando los ojos
me quedo dormido,
la vida no existe
tan sólo el sonido
de mil corazones,
unidos en un silencio,
en un silencio vencido.
¿ Dónde rodear tu pelo ?
¿ Cuándo dibujar el aire ?
Velo de tarde que viaja callado
en los corazones amados.
Y dejo de preguntar…suspendo
el privilegio del sueño
frente a la verdad.
Dame de tus manos,
limonero callado,
los frutos dorados.
Y regresa el tiempo
sobre un ángel montado.
Horas que son días,
días que son años.
A la rueda rueda…
de un verso cansado.