La herencia de Madame Canaris -Capítulo 10- (Novela)

Angeline Castell Rouge se lo estaba pasando en grande en la playa de Le Touquet. Estaba tan feliz, tumbada sobre la toalla y tomando un poco el sol ya que hacía un tiempo primaveral a pesar de ser octubre, que se puso a cantar y José Roberto Ortero de Jumilla no la quiso interrumpir…

– Tengo millares de estrellas y tengo la luna y el sol y la luz de tu mirada, y la luz de tu mirada dentro de mi corazón. Tengo las nubes del cielo y tengo las olas del mar y si tengo tu cariño, y si tengo tu cariño ya no quiero nada más. Estando contigo, contigo, contigo de pronto me siento feliz, y cuando te miro, te miro, te miro me olvido del mundo y de mí. que maravilloso es quererte así estando contigo, contigo, contigo me siento feliz. Cuando amanece nevando no siento la falta del sol y los copos de la nieve, y los copos de la nieve me parecen de color. Cuando la tarde termina y todo se empieza a nublar mi camino se ilumina, mi camino se ilumina si me vuelves a mirar. Estando contigo, contigo, contigo de pronto me siento feliz, y cuando te miro, te miro, te miro me olvido del mundo y de mí, que maravilloso es quererte así estando contigo, contigo, contigo, contigo me siento feliz. Estando contigo, contigo, contigo de pronto me siento feliz, y cuando te miro, te miro, te miro me olvido del mundo y de mí. Que maravilloso es quererte así estando contigo, contigo, contigo, hablando contigo, contigo, contigo me siento feliz. Sigue Leyendo...

Nuevo Cuaderno: Aventura en Copacabana.

Cuando llegué a Copacabana era por la mañana y me sentía poeta. Las olas del mar bramaban y me traían a la memoria versos de Espronceda mientras “El Pirata” de Andrés me miraba de arriba a abajo. Estuve a punto de soltarle dos guantazos pero me contuve porque, al fin y al cabo, yo comprendía que él no ligaba con ninguna porque era bajito, feo, poca cosa de carnes y con un ojo tuerto. O sea, todo lo contrario de un galán con bigote a lo Errol Flyn o sin bigote como Ricardo Montalbán. Y es que “El Pirata” de Andrés, además, era barbilampiño y tartamudeaba al hablar. Sigue Leyendo...

El que vino a España a cagar (Corregido y Completo)

Nunca he sido jamás un racista y nunca seré jamás un racista; porque pienso que el racismo es una de las lacras más nocivas que exite entre los seres humanos. Pero hay casos que claman al cielo y es justo denunciarlos. España es bien conocida, en el mundo entero, por ser patria de personas generosas que abrimos las puertas a todos los que vienen en búsqueda de un lugar mejor para vivir. Y está bien claro que no todos los extranjeros han venido a España para trabajar honradamente sino para vivir de gorra a costa de la generosidad de los españoles. En este sentido yo fui testigo de un hecho verdadero y real. Sigue Leyendo...